Page 38

EJERCITO DE TIERRA ESPAÑOL Nº 895 OCT 2015

Fuerzas Acorazadas. ¿Pasado o Futuro? César Augusto Sáenz de Santa María Gómez. Coronel. Infantería. DEM. José Manuel Llorca Díaz. Coronel. Infantería. DEM. INTRODUCCIÓN En la Primera Guerra Mundial aparece el carro de combate en los campos de batalla de Francia. A lo largo de sus cien años de historia, las unidades acorazadas y mecanizadas1 se han visto sujetas, salvo en escasos periodos, a la controversia sobre su necesidad o desaparición. En unos casos motivada por consideraciones logísticas, la dificultad de su proyección o la imagen de arma ofensiva, aparentemente incompatible con operaciones de paz o humanitarias. En otros, por la propia concepción de conflicto imperante en cada momento y que a lo largo de los últimas décadas ha ido evolucionando a través de escenarios bélicos limitados al empleo de armas nucleares en unos casos, ceñidos a la guerra irregular en otros o, más recientemente, a un concepto de lucha tecnológica y de dominio en el campo de la inteligencia que, en su conjunto daban la impresión de haber desterrado la posibilidad de un combate convencional. La guerra moderna ha traído a escena un nuevo tipo de combate, de gran volatilidad e incertidumbre, en el que las fuerzas militares pueden enfrentarse, en muchos casos de forma solapada y simultánea, en escenarios propios del combate irregular y del convencional. Es el combate híbrido. A lo largo del presente artículo pretendemos analizar las capacidades que las fuerzas acorazadas pueden aportar a este nuevo tipo del combate terrestre. 38  REVISTA EJÉRCITO • N. 895 OCTUBRE • 2015 LA FUERZAS ACORAZADAS… A MODO DE HISTORIA Los primeros carros de combate hacen su aparición en el otoño de 1916, como elemento revolucionario para desbloquear una situación estancada tras largos años de guerra de trincheras. No obstante, esta puesta en escena no puede considerarse realmente el nacimiento de las fuerzas acorazadas, ya que su empleo se limitará a ser un arma de acompañamiento de la infantería a pie. Habrá que esperar a la Segunda Guerra Mundial, cuando el ejército alemán desarrolle su concepto de guerra relámpago, consistente en el empleo concentrado de los carros de combate para penetrar profundamente en las líneas enemigas, atacar sus centros neurálgicos, logísticos y de mando, desarticulando la retaguardia y, en consecuencia, la defensa enemiga. Este concepto, que determina la aparición de fuerzas acorazadas, viene acompañado de la necesidad de contar con una infantería y unos apoyos (artillería, zapadores, etc.) aptos para seguir a las unidades de carros de combate y proporcionarles la capacidad de organizar, ocupar y controlar el terreno. Con ello aparece el complemento necesario: las unidades mecanizadas. Pero con la guerra relámpago nace además un concepto que excede el mero empleo de las unidades y que va a determinar el estilo y el carácter de este tipo de fuerzas hasta nuestros días. La actuación rápida y profunda de las


EJERCITO DE TIERRA ESPAÑOL Nº 895 OCT 2015
To see the actual publication please follow the link above