Laboratorio de ingenieros del ejército general Marvá V Máquina de calibración de cédulas de cargas. rección del coronel del Cuerpo de Ingenieros de Armamento y Construcción José Luis Cabanes Torrente, una profunda reforma y renovación de su estructura orgánica e instalaciones, en cierto estado de abandono por falta de medios, que concluyen en 1993 y que SLJVUÄLYLUZ\LZHKVHJ\HS Desde entonces, el Laboratorio ha mantenido ese espíritu renovador que, siguiendo la consigna de su fundador de permanecer en la medida que permitan los presupuestos a la vanguardia de la ciencia en su campo, ha conseguido combinar renovación y tradición, dando como resultado una unidad única y original: el Laboratorio de Ingenieros. El 115 aniversario de su creación se aprovechó para añadir al nombre original el de su fundador, general Marvá, ya que este nombre quedaba libre al unirse los regimientos Zarco del Valle y general Marvá, ubicados en el Pardo, en una única unidad que tomó el nombre del primero de ellos. En 2011, las direcciones del INTA y la DGAM deciden retomar una idea de hacía años que nunca se llegó a completar: la de unir en un único centro tecnológico e investigador los diferentes centros o unidades tecnológicas del Ministerio de Defensa, como el ITM, que a su vez aglutina a antiguos centros tecnológicos de Defensa (Polígono de Experiencias de Carabanchel, TPYCEA, CIDA, Centro de Ensayos Torregorda, LQCA y Fábrica de la Marañosa), el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) y el Canal de Experiencias Hidrodinámicas de El Pardo (CEHIPAR). Esta vieja idea, que es en realidad la que dio origen en su día al ITM, no incluyó, por diversos motivos, el campo relacionado con la construcción y, por consiguiente, al Laboratorio de Ingenieros, pues la actividad del organismo que se creaba se presentaba como más cercana a las tecnologías relacionadas con el armamento. Pero ahora, en última instancia, y a propuesta del Director General de Infraestructura, se incorpora a esta empresa el Laboratorio de Ingenieros, para ampliar más aún el campo de acción del nuevo organismo, aunque este último no tenga apenas actividad investigadora y se centre más en todo lo relacionado con los ensayos de materiales. Así, el programa de integración planteado ahora es mucho más ambicioso, pues con la unión prevista se intenta aglutinar todas las tecnologías existentes, desde el armamento más puro al mundo aeroespacial, pasando por el ámbito marino y el de la construcción, convirtiéndose todos en un único centro que tenga carácter investigador y sea además público y autónomo, lo que se conoce como organismo público investigador (OPI). Por su tamaño y actividad, el nuevo centro que se pretende crear puede convertirse en el mayor de Europa. Tomada la decisión de la creación de un OPI que aglutinara a todos los centros investigadores, enseguida se eligió al INTA como germen del nuevo organismo, que además lideraría todo el complejo proceso de fusión. De ese modo, se inician unos contactos previos entre los centros implicados (INTA, ITM y CEHIPAR), y se elaboran unos primeros cuadros comparativos de la actividad investigadora para estudiar posibles sinergias y evitar duplicidades. En mayo de 2012 se invita al Laboratorio de Ingenieros a formar parte de la fusión, y se crean cuatro grupos de trabajo simultáneos (económico, técnico, de personal y de organización), con sus respectivas comisiones, 120 |)NGENIEROS 0OLITÏCNICOS
MEMORIAL CIP Nº 1
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