La Especialidad de Construcción del Cuerpo de Ingenieros Politécnicos y sus raíces signe, encarna ejemplarmente nuestras dos especialidades de Armamento y Construcción, y da nombre al premio que cada cuatro años se otorga al compañero con historial más distinguido. En la actualidad ostentan esta distinción los generales del Cuerpo de Ingenieros Politécnicos don Emilio Ramos Estaún y don Guillermo Jenaro Garrido. Don Sebastián Fernández de Medrano es así, además de una raíz, un espejo en que se mira todo nuestro Cuerpo. CREACIÓN DEL CUERPO DE INGENIEROS MILITARES La situación de los ingenieros militares en España era caótica al advenimiento de Felipe V. Su número era muy reducido y la mayoría se encontraban desmoralizados, a causa de su poca consideración y lo bajo de sus emolumentos, que se recibían tarde y mal. Ante tal situación, en 1709, el marqués de Bedmar, que había conocido en Flandes, con ocasión de mandar el Ejército en aquel territorio, al ingeniero mayor don Jorge Próspero Verboom, propuso al rey que lo hiciera venir a España para organizar a los ingenieros como en Francia. El 4 de julio de 1710 propuso Verboom un plan para organizar a los pocos ingenieros de que disponía. Proponía para los ingenieros las siguientes categorías o clases: ingeniero director, en jefe, en segundo y ordinario; y que tuvieran asimilación militar, pues, además de que ya existía en artillería, «los ingenieros necesitan los grados … para dar consideración a las funciones de su empleo». El 17 de abril de 1711, y tras diversas vicisitudes, el rey aprobó, por un real decreto expedido en Zaragoza, el plan de organización del Cuerpo de Ingenieros Militares propuesto por el ingeniero mayor don Jorge Próspero de Verboom. Ese día nació el Cuerpo de Ingenieros Militares, cuyo tercer centenario estamos celebrando. Anteriormente, el 13 de enero de 1710, Verboom había sido nombrado «ingeniero general de mis ejércitos,WSHaHZ ` MVYPÄJHJPVULZ KL VKVZ TPZ YLPUVZ WYVPU- cias y estados», y simultáneamente «cuartel maestre general de los ejércitos de todos los reinos, provincias de España y otros estados». El 4 de julio de 1712, el general Verboom hizo presente, en un memorial dirigido al rey, un esbozo de organización de los pocos ingenieros con que contaba en aquel momento (siete venidos de Flandes, dos franceses que querían servir a España, los que aquí quedaban y los que se pudieran reclutar), los cuales se distribuirían en Cataluña, Reino de Aragón, Reino de Navarra, Reino de Valencia y Reino de Murcia. Tal despliegue puede considerarse precursor de la estructura de las comandancias de obras, adscritas en la actualidad al Cuerpo de Ingenieros Politécnicos. ACADEMIA DE BARCELONA Preocupación primordial desde su creación fue la formación y acceso al Cuerpo de nuevos aspirantes. Desde 1720 la formación de los futuros ingenieros militares se realizó en la Academia de Barcelona, inspirada en su espíritu y forma en la de Bruselas.Fueron sus primeros directores don Mateo Calabro, hasta 1738, y don Pedro de Lucuce y Ponce, hasta 1779;este último, eminente ingeniero y matemático, fundador y director de la Real Sociedad Matemática de Madrid y director del ramo de academias (del Cuerpo) hasta 1779.Los alumnos de la Academia, al igual que los de la KL )Y\ZLSHZ KLIxHU ZLY VÄJPHSLZ ` JHKLLZ KL SHZ HY- mas, y algunos caballeros civiles. La organización de la carrera era de acuerdo con cuatro cursos de nueve meses de duración, los dos primeros orientados a una MVYTHJP}UImZPJHLUTHLTmPJHZ`MVYPÄJHJP}U`SVZ dos últimos a especialidades como mecánica, hidráu- SPJHHYX\PLJ\YHJPPS`TPSPHY`ZPLTWYLMVYPÄJHJP}U Existieron además otros centros de formación,dependientes de la Escuela de Barcelona, en Ceuta, Orán y Cartagena de Indias. 14 |)NGENIEROS 0OLITÏCNICOS
MEMORIAL CIP Nº 1
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