En la duna de Bolonia, declarada monumento natural, se localiza parte de la dependencia militar de Punta Camarinal. Carlos Sánchez L En el CENAD San Gregorio (Zaragoza) el relieve está constituido por una extensa red de barrancos y valles de fondo plano, «las vales», entre las que destaca el Barranco de la Virgen, incluido este último como lugar de interés geológico en el proyecto de decreto del Gobierno de Aragón por el que se crea el inventario de LIG de Aragón (2011), por ser un inmejorable ejemplo de incisión fluvial sobre un lecho de yesos y por la presencia de notables cristales de yeso que le otorgan interés mineralógico. La climatología de escasa precipitación y los suelos con gran contenido en yesos, condicionan una vegetación muy característica, entre la que destaca la vegetación gipsícola mediterránea, considerada un hábitat prioritario según la Directiva 92/43/CEE. L El campo de maniobras de la Brigada Paracaidista en Uceda (Guadalajara) comenzó a formarse antes de que se elevara el Sistema Central. En este territorio ha En muchos casos, la condición militar de estas zonas las ha salvado de la presión antrópica y la especulación quedado registrada la historia del nacimiento de estas montañas, del relleno de la zona deprimida que se formó a sus pies (relleno que terminó con el depósito de las «rañas») y del posterior vaciado y elaboración del valle del Jarama, proceso en el cual nos encontramos y que deja como testigos las terrazas y una densa red de pequeños barrancos y cárcavas, labradas por las lluvias urbanística en las laderas arcillosas, que ponen al descubierto las tierras de llamativos colores ocres o rojizos. En su espléndido paisaje, donde contrastan formas y colores, destacan por su interés las «rañas», llanuras pedregosas peculiares de la Península Ibérica, producidas por grandes aluviamientos de aguas que arrastraban sedimentos desde la Sierra y el sistema de terrazas elaborado por el Jarama, solamente en la ribera izquierda, donde se asienta el campo de maniobras. De este modo, en Uceda tenemos representado el contexto «Red fluvial, rañas y paisajes apalachianos del Macizo Ibérico» de la Ley 42/2007. L En el borde costero de la cuenca del Guadalquivir, el campo de tiro de Médano del Loro está recorrido por el acantilado de El Asperillo, incluido en el inventario IELIG por la Junta de Andalucía con el nombre de «Acantilado de la Torre del Oro», por sus sedimentos que nos cuentan la historia de las fluctuaciones climáticas y de los cambios del nivel del mar de la costa onubense desde el Pleistoceno a tiempos recientes. Y tantos y tantos más: la costa cretácica del CENAD de Chinchilla, las viejas rocas arrasadas de la Tierra Cha en el CMT de Parga, el nacimiento de las Islas Canarias en el complejo Basal del CMT de Pájara, los volcanes de la Isleta o del CMT de montaña Bermeja, el reflejo del choque entre Iberia y África en las terrazas de la playa del campo de adiestramiento de la Armada en El Retín, los primeros pobladores de Asturias en el CMT de Cabo Noval, los espectaculares acantilados de Jaizkibel, que forman parte de una de las seis áreas de interés geológico de Guipúzcoa; La Mola, lugar de interés geológico por aflorar en sus acantilados rocas paleozoicas cubiertas por la unidad de las calizas con fósiles de la barrera arrecifal miocénica… La variedad geológica de los territorios de las Fuerzas Armadas alberga y condiciona una importante biodiversidad, así como la presencia de lugares de gran valor patrimonial, como puede ser el caso de los yacimientos de Atapuerca. Además, se trata de territorios de titularidad pública, generalmente con un medio natural bien conservado, en ocasiones incluso mejor que su entorno, por lo que pueden actuar como refugios para especies amenazadas. Todo ello hace de los terrenos adscritos al Ministerio de Defensa un activo básico para el patrimonio natural en general, y geológico en particular, de España. El Ministerio de Defensa, consciente de la problemática ambiental que nos rodea en el transcurso de las últimas décadas, y conocedor de que el sustrato geológico alberga y sustenta la riqueza biológica y condiciona en gran medida la singularidad y belleza de sus paisajes, ha asumido en su política medioambiental la protección de la gea en sus espacios naturales. En sus propiedades se encuentra representado un porcentaje importante de los contextos geológicos de interés mundial y varios lugares de interés geológico del inventario español. En muchos casos, el buen estado de conservación de estas zonas es consecuencia de su condición militar, que las ha salvado de la presión antrópica y, sobre todo, de la especulación urbanística. L Noviembre 2015 Revista Española de Defensa 43
REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA Nº 322
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