Actividades<< Actividades << DISCURSO PRONUNCIADO DURANTE LA TOMA DE MANDO DEL TERCIO “GRAN CAPITAN” POR EL CORONEL D. ANTONIO ROMERO LOSADA 525 · IV-2013 29 Tercio “Gran Capitán” Quiero en primer lugar dar gracias a Dios por haberme permitido estar hoy aquí, en segundo lugar, quiero agradecer a toda la cadena de Mando el que haya confi ado en mí, para ocupar este destino. Agradezco muy especialmente la presencia de mis superiores, compañeros y amigos que se han desplazado hasta Melilla. Mi agradecimiento eterno para mi familia que me ha acompañado siempre y hoy también. Mi general, soy plenamente consciente de la alta responsabilidad que contraigo y quiero manifestar públicamente que desde hoy cuenta con mi lealtad, subordinación y entrega para cumplirla. No puedo continuar sin reconocer la excelente labor que ha desarrollado el coronel Tovar a quien hoy relevo en el mando de este Tercio, muchas gracias mi coronel, tu ejemplo será un acicate más para el cumplimiento de mi misión. A los que han sido mis superiores en Fuerteventura y hoy están aquí acompañándome quiero decirles que intentaré no defraudarles, pues a ellos les debo todo lo que sé de La Legión. Vosotros sois leyenda viva legionaria y seréis un referente para mí en estos dos años de mando. Muchas gracias por estar aquí. Ahora quiero dirigirme especialmente a vosotros, damas y caballeros legionarios del Tercio “Gran Capitán”: la misión a la que antes aludía no será posible cumplirla sin vuestro trabajo y colaboración, por eso, a partir de ahora formamos un equipo indisoluble. Para ello os ofrezco lealtad y esfuerzo y os pido exactamente lo mismo. Un esfuerzo, que siguiendo la mejor tradición legionaria nos llevará hasta el sacrifi cio. Me basaré en los que considero tres pilares fundamentales en La Legión: la instrucción, la disciplina y el Credo Legionario. Puestos los tres en acción por ese motor que ha sido siempre la generosidad con que los legionarios desarrollan su labor sin contar los días, ni los meses, ni los años. Soy plenamente consciente del legado que heredo, de la historia que ha forjado La Legión y concretamente nuestro Tercio “Gran Capitán”, a base de entrega generosa, de esfuerzo, sudor y sangre. Sobre todo pienso que los hechos de armas que la jalonan no fueron el resultado de un impulso heroico de un puñado de valientes, sino el fruto de muchas horas de sudor, de mucho trabajo oscuro, de mucha entrega silenciosa en el campo de instrucción que es donde se forjan los héroes del mañana. Esa, damas y caballeros legionarios, es la misión de la que venimos hablando y este y no otro es el trabajo que a los miembros del Tercio “Gran Capitán”, conmigo momentáneamente al frente, nos toca realizar. Termino como empecé, pidiendo la ayuda de nuestro protector el Santísimo Cristo de la Buena Muerte y de nuestra Madre, la Virgen Inmaculada, para llevar a buen término tan difícil tarea. Teniente coronel jefe de la línea, por favor, mande fi rmes. Y ahora, damas y caballeros legionarios, para sellar el compromiso que hoy adquiero ante vosotros, con el gorro en la mano izquierda y el brazo en alto gritad conmigo: ¡VIVA ESPAÑA! ¡VIVA EL REY! ¡VIVA LA LEGIÓN!
LA LEGION 525
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