Seguridad y Defensa REVISTA EJÉRCITO • N. 896 NOVIEMBRE • 2015 7 Estas son las circunstancias en las que el Estado Islámico (DAESH) ha implantado el terror como elemento sustancial de su actuación en Siria e Irak. Decapitaciones, lapidaciones, fusilamientos, lanzamientos desde edificios, secuestros, esclavización, reclusiones masivas y el exterminio de poblaciones enteras forman parte de la cotidianeidad en los territorios bajo el régimen del Califato. Esta política implacable solo tiene sentido si el califa Abu Bakr Al Bagdadi considera que la crueldad contra los civiles le proporciona una ventaja estratégica significativa frente a sus enemigos locales y occidentales. Para intentar desentrañar cuáles pudieran ser los supuestos beneficios de esta victimización de la población civil en los territorios ocupados, conviene identificar primero los principales elementos que caracterizan este tipo de conducta. Victimización de civiles: el concepto La victimización de civiles es la política o la estrategia militar que consiste en atacar de forma intencionada a la población no combatiente o, por el contrario, que no discrimina de forma efectiva entre combatientes y no combatientes, resultando en ambos casos en la muerte o el sufrimiento de un elevado número de civiles. Se trata por lo tanto de un concepto muy amplio que puede abarcar numerosas formas de agresión ejecutadas normalmente por fuerzas regulares o insurgentes, pero también por instituciones civiles bajo la dirección de gobiernos nacionales y organizaciones internacionales. Todas las partes enfrentadas en un conflicto son, por tanto, susceptibles de contribuir al maltrato de la población, sin que importe lo justas que sean sus causas o lo legitimados que se consideren para actuar. De hecho, no es extraño que las acciones de victimización ejecutadas por facciones armadas se complementen con otras de apariencia menos violenta, pero igualmente dañinas. En este sentido, debe reconocerse que las confiscaciones, los bloqueos y las sanciones económicas son susceptibles de dañar en extremo a los ciudadanos, despojándoles de sus posesiones e impidiéndoles el acceso a alimentos, medicinas y otros bienes de primera necesidad. Los principales elementos que caracterizan a la victimización de civiles son las propias víctimas, la estrategia, la intencionalidad y la no discriminación. Las víctimas, es decir, los no combatientes, se definen por contraposición a los combatientes, tal y como determina el Protocolo adicional I a los Convenios de Ginebra Abu Bakr Al-Baghdadi
EJERCITO DE TIERRA ESPAÑOL Nº 896 NOV 2015
To see the actual publication please follow the link above