NUEVAS TENDENCIAS EN LAS UNIDADES CIMIC José Francisco Sierra Corredor. Teniente coronel. Infantería. DEM 36 REVISTA EJÉRCITO • N. 905 SEPTIEMBRE • 2016 a la población civil, víctima de los conflictos, y de ayudar a la resolución de los mismos y, finalmente, las organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, cada vez más numerosas y que tienen una gran variedad de objetivos, orígenes, financiación y formas de trabajar, que suelen estar centradas fundamentalmente en la ayuda humanitaria y en la reconstrucción. Fruto de lo anterior es la necesidad de que en el planeamiento y desarrollo de las operaciones militares se disponga de una serie de órganos y elementos especializados capaces de asesorar al mando sobre el modo en el que se deberían materializar las relaciones y la coordinación con todos estos actores, además de realizar actividades en este campo con el objetivo fundamental de facilitar y apoyar las operaciones militares, lo que contribuye de forma incuestionable al cumplimiento de la misión asignada. Este artículo pretende proporcionar una visión de las tendencias de los países de nuestro entorno en lo referente a sus unidades CIMIC y de cómo se han adaptado para dar respuesta a los retos surgidos de los nuevos conflictos y escenarios. ANTECEDENTES Aunque el término CIMIC se empezó a utilizar en el Cuerpo de Acción Rápida (ARRC) desde el año 1994, no fue hasta 1996 cuando el término apareció en la doctrina OTAN. Eso motivó la creación de células específicas en los cuarteles generales, G9 (brigada, división, LCC) y J-9 (cuarteles generales conjuntos), y PLMM de las pequeñas unidades (S-5, batallón) responsables del planeamiento, entre otras, de las actividades relacionadas con la cooperación cívico-militar (CIMIC). El Batallón de Cooperación Cívico Militar I, más conocido por su acrónimo BCIMIC I, es la única unidad de nuestras Fuerzas Armadas especializada en llevar a cabo actividades encaminadas a conseguir el apoyo a la misión mediante la cooperación y coordinación entre el mando de la fuerza y el entorno civil del área donde son o van a ser empleadas las fuerzas militares. La unidad, que cuenta con solo diez años de historia, tiene ya una amplia experiencia y ha participado en la mayoría de las operaciones en las que han desplegado nuestras Fuerzas Armadas (FAS), operaciones que, fundamentalmente, nuestras FAS han llevado a cabo en el exterior. La publicación de nuevos conceptos en este ámbito de las operaciones, como el CMI (Civil Military Interaction) o revisión de otros (ver nuevo concepto de cooperación cívico-militar1), las lecciones aprendidas extraídas de las operaciones, así como de las nuevas tendencias en lo concerniente a las operaciones de información o de influencia, han dado como resultado que muchas de las unidades de cooperación cívico-militar de los países de nuestro entorno hayan sido objeto o se encuentren inmersas en un proceso de reorganización o reestructuración para dar respuesta a los nuevos desafíos. Esto ha supuesto, con carácter general, un incremento de dichas unidades, no solo en cantidad sino también en calidad, y disponen de personal cada vez más preparado en este aspecto de las operaciones. La razón hay que buscarla en la mayor presencia de actores civiles en las zonas de operaciones; por un lado, las autoridades y líderes locales y los líderes religiosos; por otra parte, las organizaciones internacionales y agencias dependientes de ellas, responsables de socorrer
EJERCITO DE TIERRA SEPTIEMBRE 2016
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