El prestigio alcanzado debe servir como plataforma para seguir creciendo Enero 2017 Revista Española de Defensa 55 Presidencia del Gobierno En dicho programa señalamos que la diplomacia preventiva, la no proliferación y el desarme y la lucha contra el terrorismo guiarían nuestros pasos en el CSNU. Asimismo, apuntamos a la protección de civiles y al respeto del derecho internacional humanitario como nuestras preferencias, pero también la mejora de los métodos de trabajo del Consejo y el compromiso de llevar las nuevas amenazas, como el cambio climático o la ciberseguridad, al CSNU. España, por tanto, entró en el Consejo con unas líneas claras de actuación y unos compromisos anunciados públicamente. No contentos con lo anterior, transcurrido el primer año de mandato elaboramos un documento de revisión de lo hecho durante el año 2015 y de prioridades para nuestro segundo año en el Consejo, sobre la base del programa original. Esta planificación ha sido clave para el éxito de nuestra presencia en el Consejo. La coordinación ha sido también otra de las características más notables, que ha impregnado la campaña y nuestra actividad en el Consejo. Dicha coordinación ha tenido lugar en dos planos: interno y externo, a distintos niveles. En primer lugar, a nivel interno, se ha contado en todo momento con el inestimable apoyo y el compromiso activo de Casa Real, de Presidencia del Gobierno y de todos los Ministerios. Por su parte, el propio Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, ha funcionado como un mecanismo de relojería (con tres puntales: Sede Central, Misión ONU y Embajadas) al servicio de la campaña y del seguimiento de los trabajos del Consejo. La coordinación se ha extendido también a todos los poderes del Estado y durante este tiempo se ha adoptado una proposición no de Ley en el Congreso de los Diputados de apoyo a las prioridades de España en el CSNU, una declaración institucional del Senado en favor de la agenda de Mujeres, Paz y Seguridad en el CSNU, así como varias comparecencias de miembros del Gobierno ante el Parlamento. Pero España también ha desarrollado una importante labor de coordinación externa. En primer término, en el seno del Consejo. Hemos dado prioridad a los métodos de trabajo, es decir, a la organización de los trabajos del CSNU, al conjunto de normas y prácticas que encauzan la actividad cotidiana de dicho órgano, que viene pautado por el reglamento del Consejo (aun provisional, lo que da una idea de lo delicado de estos temas) y por un buen número de normas consuetudinarias. En el debate sobre métodos de trabajo que organizamos durante nuestra presidencia de octubre de 2015 apostamos por novedosos mecanismos de coordinación, tales como las intervenciones conjuntas (un país habla en nombre de varios, lo que favorece la agilidad de las reuniones); o la vivificación de las sesiones mediante la inclusión de los temas debatidos en el documento de conclusiones del mismo (normalmente se elaboran Mariano Rajoy preside el Consejo de Seguridad el pasado día 20 de diciembre.
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