TEMAS GENERALES Guarnición y dotación del NTM Creoula durante el curso 2010 de la UIM en Portimão. (Foto: UIM). representaban un gran avance, pues hasta ese momento los demás eran de madera y sin máquina, como «las cuatro santas», las primeras goletas que a comienzos de la década de 1930 se aventuraron a pescar entre los hielos del estrecho de Davis. Aún así, los nuevos no dejaban de ser un anacronismo en el tiempo en que en Terranova faenaban arrastreros que constituían grandes flotas alrededor de buques factoría. Y mientras tanto, los navíos de a frota branca navegaban cargados de minúsculos doris que tripulaba un solitario hombre, que primero pescaba a línea y después procesaba bacalaos en cubierta antes de salarlos en la bodega. Faenas que llenaban inmensas jornadas de trabajo de un alto requerimiento físico y psíquico, desde abril a octubre; meses en los que los navíos, siguiendo el ciclo solar, subían a más de 68º N y luego descendían hasta los puertos de invernada. Con todo, y a pesar del aumento del tonelaje de la flota, la productividad por navío disminuía, siendo la acción reguladora del Estado Novo la protección de tan arcaica y bella flota, que desapareció con él. No obstante, la memoria de una gesta que arrancó a comienzos del XVI (2) (Azpiazu, 2008) y finalizó en 1973 con el Creoula (2) El grupo occidental de las Azores se descubre en 1427 por Diego de Silva; situadas en la mar profunda, sirven de plataforma de apoyo para explorar el Atlántico Norte, lo que hace João Vaz Corte-Real en 1472 al alcanzar lo que para algunos podría ser la isla de Terranova. Azpiazu cita a Matías de Echeveste, que navegó a Terranova cuando tenía quince años, en 1553, cuando 50 Enero-feb.
REVISTA GENERAL DE MARINA ENE FEB 2017
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