LAS MISIONES DE PAZ Aunque ya se había participado con carácter muy esporádico en operaciones similares a las que hoy se denominan “Operaciones de Paz” la participación española en misiones de paz es relativamente reciente. Desde entonces se ha producido un crecimiento impetuoso y se ha evidenciado un empeño cada vez más convencido que ha llevado a España a participar en 42 operaciones de paz y de ayuda humanitaria, con la participación de cerca de 60.000 militares de los tres Ejércitos y de la Guardia Civil. Desde finales de los años 80, tanto España como sus aliados, han intervenido en una serie de misiones de interposición, reconstrucción o simplemente ayuda humanitaria donde los helicópteros han mostrado todo su potencial. Tras la guerra civil de Angola, las guerras del Golfo, la guerra de los Balcanes, las operaciones en Afganistán e Iraq, las inundaciones de Mozambique o el terremoto de Haití, son ejemplos. Los más recientes, y todavía activos en el Golfo de Adén en protección de la marina mercante y pesquera contra la piratería o la fuerza de interposición en el Líbano como medida de Naciones Unidas de contención en el conflicto árabe-israelí. Son misiones de MEDEVAC, CSAR y apoyo a los equipos de reconstrucción PRT (Provincial Reconstruction Team). En definitiva, los helicópteros son necesarios en los nuevos escenarios de conflicto asimétrico, donde no hay frentes convencionales o donde la amenaza es dispersa, no localizada y golpea indiscriminadamente a grupos militares o civiles. En todos los casos, la cobertura de la zona amenazada, o la ausencia de infraestructuras terrestres obliga al uso de trasporte de despegue vertical, en áreas confinadas o de difícil acceso. Esto también se aplica a las misiones de emergencia tras desastres naturales donde el denominador común es la destrucción de comunicaciones viales. EL FUTURO Con la llegada del siglo XXI hemos entrado en una cuarta generación de helicópteros. Los objetivos que nos desafían cada día son volar más alto y más rápido, con más seguridad y comodidad, aplicar más innovaciones al diseño, buscar eficacia al menor coste y no perder de vista ser un perfecto vecino, siempre respetuoso con el medio ambiente. Por otro lado, los métodos de diseño y ensayo han evolucionado hasta el punto que mediante los ordenadores se pueden predecir comportamientos estructurales, flujos aerodinámicos o distribución de temperaturas. Las maquetas virtuales en 3D permiten dimensionar los elementos de resistencia, la estructura y permiten organizar el ruteado de los mazos de cables a la vez que se anticipan las futuras acciones de mantenimiento y chequeo en términos de accesibilidad a los registros y a los compartimientos de aviónica. Un helicóptero moderno como el NH90 dispone de más de 50 km de cableado y REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Marzo 2017 199
REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA 861
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