Page 71

REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA 861

que se mantendría prácticamente sin cambios dando lugar dos años después al Su-27 original, siendo necesario acometer una serie de modificaciones estructurales y de elementos clave para desempeñar la misión de cazabombardero de penetración, algo que quedó reflejado desde un primer momento en la configuración de los prototipos construidos. Fue en este punto cuando las ideas de diseño implementadas en el concepto Su-27IB tomaron forma completa: el cockpit, que adoptaría una configuración biplaza con la tripulación sentada lado a lado en sendos asientos eyectables cero-cero K-36DM, fue diseñado de forma que se dispusiese de mejoras ergonómicas con vistas al desarrollo de una mayor calidad de vida y de un menor cansancio físico y mental en misiones de larga duración de perfiles diversos, disponiendo incluso de un espacio para el alojamiento de alimentos, trayendo consigo la necesidad de presurización completa, con el objeto de poder prescindir en cualquier momento de la máscara de oxígeno, y ahorrando por otra parte todo lo posible en materia de duplicación de instrumentación, siendo necesario aumentar la sección frontal del fuselaje en los tres ejes de referencia (altura, anchura y longitud de la misma) de forma que se pudieran implementar todas estas características. La tripulación estaría rodeada de una cubierta de titanio, con el objeto de protegerles del fuego antiáreo para aquellas misiones que fuera necesario desarrollar siguiendo un perfil de vuelo a baja cota. Así, el primer prototipo, el T-10V-1, incluyó canards con vistas a mejorar tanto el manejo a baja cota como mantener la excelente maniobrabilidad obtenida en el Su-27, aliviando aerodinámicamente los efectos generados por la REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Marzo 2017 213


REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA 861
To see the actual publication please follow the link above