nics High-power microwave Advanced Missile Project), un efector capaz de destruir aquellos dispositivos electrónicos que se encuentren en su radio de acción mediante la irradiación de un potente pulso electromagnético. Integrado en el misil AGM-158 Joint Air-to-Surface Standoff Missile (JASSM), el sistema CHAMP podría llegar a neutralizar todo un sistema de defensa aérea sin ni siquiera requerirse el empleo de fuerza letal para ello. Siempre que el adversario disponga de defensas aéreas basadas en superficie, su supresión será un requisito indispensable para obtener el grado deseado de dominio de su espacio aéreo. Por ello, las operaciones SEAD no sólo van a mantener su vigencia en el futuro, sino que previsiblemente seguirán ganando en relevancia y complejidad conforme lo hagan los sistemas a suprimir. Independientemente del enorme salto tecnológico existente entre 1965 y la actualidad, el concepto de operaciones SEAD se ha mantenido prácticamente invariable hasta la fecha. Sin embargo, el actual déficit cuantitativo, un cierto desfase tecnológico acumulado, las posibilidades que ofrece la integración en red y la aparición de nuevas formas de proyección del poder aéreo pueden provocar cambios sustanciales en un futuro próximo. La apuesta por el desarrollo de nuevas formas de SEAD supone hoy una excelente oportunidad de obtener una posición de liderazgo en el ámbito de las operaciones militares combinadas. Con ella, el país que la realice puede convertirse en un actor relevante allá donde se requiera dicha capacidad en el futuro. No obstante, para ello es necesario redefinir su concepto potenciando la versatilidad y modularidad de sus elementos, de manera que éstos puedan ser utilizados también para otros fines. Las dificultades para afrontar este desafío no son pocas. A las limitaciones financieras se le suman los riesgos de apostar por un proyecto con algunas incertidumbres y un abanico de posibles soluciones enormemente amplio. Pero así ha sido como se ha escrito la historia de la aviación: en ella no ha habido proyecto innovador de éxito que haya estado exento de dichos riesgos. Lo principal en este momento es recuperar el convencimiento de la importancia que las operaciones SEAD van a seguir teniendo en el futuro. Para eso sí que no hay tiempo que perder. Ya lo dejó claro el propio Napoleón cuando, ajeno a esta discusión del siglo XXI afirmó con acierto que: (…) “En la guerra, me interesa menos el espacio que el tiempo. El espacio se puede recuperar, pero el tiempo… jamás”. Notas 1NATO Allied Joint Publication AJP-3.3.1 (B) “Allied Joint Doctrine for Counter-Air” (2010). 2Wild Weasel (“Comadreja Salvaje”) fue la denominación del primer proyecto de desarrollo de un sistema de armas específico SEAD por parte de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAF) durante la Guerra de Vietnam (1965). Posteriormente, dicho término ha venido siendo empleado durante décadas para denominar con carácter general a las operaciones SEAD. 3Uno de los primeros sistemas implementados a tal efecto fue el ODIN (Operational Data Interface) con el que fueron equipados los Tornado ECR (versión de combate electrónico y reconocimiento especializado en misiones SEAD), que permitía el intercambio de información de amenazas procedente de los sensores de cada una de las plataformas equipadas con dicho interfaz. 4Network-Centric Warfare: doctrina que persigue la conectividad e integración en red de todos los elementos de combate disponibles, al objeto de explotar de manera global y eficiente la información y sus fuentes, gestionar recursos y dirigir la batalla desde una perspectiva integral. 5MAJ. GEN. WALTER BUCHANAN. Air Force Current Operations. Briefing to Congressional Air Power Caucus. Bolling AFB, 12 de marzo de 2001. 6Los escasos medios SEAD físicamente disponibles y determinadas restricciones de carácter político empujaron a la US Navy (a pesar del deseo expreso del gobierno de los EEUU de desempeñar un papel secundario en el conflicto) a lanzar más de 100 Tomahawks en el Día 1 de la operación para –entre otros objetivos– debilitar de manera decisiva el sistema de defensa aérea libio. 7A pesar de no ser miembro de la OTAN y por tanto no ser objeto de este artículo, Australia se está dotando de un importante potencial en operaciones SEAD gracias a la adquisición del material norteamericano más avanzado (EA-18G Growler y AGM-88E AARGM). REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Septiembre 2016 741
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