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Revista General de Marina 269 5 dic

TEMAS GENERALES Cádiz la Instrucción para el gobierno, educación, enseñanza y servicio de los Guardiasmarinas y obligación de sus oficiales y maestros de facultades (11), se tuvo que ir trabajando de acuerdo con las experiencias que aportaba el cuadro inicial de oficiales y maestros de facultades, al tiempo que se iba configurando lo que sería en el futuro. Hay que significar que José Patiño, «educado en Milán, entró en el noviciado de los Jesuitas, y pasó después, por voluntad de sus superiores, para perfeccionar sus estudios, a una de las casas que en Roma poseía la Compañía » (12), por lo que confiaba, por experiencia propia, en el sistema colegial que proponía para alcanzar la virtud, uno de los tres pilares en que fundó la formación que hemos llamado integral. La formación militar: la Real Compañía de Guardias Marinas Parece evidente que Patiño tenía que buscar ejemplos a seguir; en el área militar, para la llamada gloria, tomó como modelo las Guardias de Corps creadas por Felipe V en febrero de 1706, que fueron una copia de una institución francesa, y cuya influencia en la Compañía de Guardias Marinas fue muy importante; así, hay que señalar que el primer capitán de la Compañía fue Luis Dormay quien, según Blanco Núñez (13), también pertenecía a las Guardias de Corps, y simultaneó sus empleos. Se le formó asiento como capitán de la Real Compañía el 10 de febrero de 1718, pero se aclara en dicho asiento que venía ejerciendo el puesto desde el 1 de abril de 1717. Es más, por un Real Decreto de 6 de septiembre de 1720 se dice que: «…concurriendo en don Luis Dormay los tres empleos de Mariscal de Campo, Subteniente de la Guardia de Corps Flamenca y comandante de la Compañía de Cadetes de Marina… ser de mi Real ánimo que de los doce meses que tiene el año resida precisamente los ocho en Cádiz y los otros cuatro en la corte… el tiempo que la Compañía Guardia de Corps Flamenca ha de entrar de cuartel...» (14). (11) Instrucción para el gobierno, educación y servicio de los Guardiasmarinas y obligación de sus oficiales y maestros de facultades (15 de abril de 1718), ms. 1181. Museo Naval. (12) RODRÍGUEZ VILLA, A: op. cit., p. 12. Tuvo en él una gran significación este hecho ya que al final de su vida «recibido el Viático, hizo su testamento. Acordándose de que en Roma había sido jesuita, en el noviciado de aquella Corte, dispuso que le enterrasen con los jesuitas en el noviciado de Madrid», en op. cit., p. 115. (13) BLANCO NúÑEZ, J. M.ª: La Armada Española en la primera mitad del siglo xVIII, Izar, 2001, p. 68. (14) Ibídem, p. 63. 2015 881


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