crónicas de a bordo AJEMA contaran conmigo para el ascenso a oficial General, después la satisfacción de mandar el Grupo de Acción Naval n.º 1, lo que significaba volver a mis orígenes de oficial y poder estar directamente implicado en la dirección y mando de la Fuerza, y por último y personalmente la oportunidad de volver a mi casa al destinarme a Ferrol tras más de ocho años entre Madrid y Rota. Al tratarse de uno de los dos pilares fundamentales que tiene la Fuerza de Acción Naval, ¿cuál es el mayor reto que ha tenido que afrontar el CoMGRuP 1? Con el apoyo certero de mi Estado Mayor, y la colaboración inestimable de Comandes-31, Comandes-41 y los Comandantes del Patiño y Cantabria, tratamos que nuestras unidades estén en el grado de alistamiento demandado por el ALFLoT y de esta forma cumplir todos los cometidos que nos van asignando. Esto ha sido especialmente importante en el periodo entre mi toma de posesión y mediados del pasado año, pues la Armada, al igual que el resto de España, se encontraba en una fase de necesarias restricciones económicas que nos han obligado a ser imaginativos para mantener unos mínimos niveles de adiestramiento en nuestras unidades. ¿Cuáles son los objetivos que se ha fijado desde su toma de posesión del destino? Como no podía ser de otra forma, el principal objetivo de mi mando es el cumplimiento de la misión de preparación de los buques tipo escolta y de los buques de apoyo al combate. Hay que mantener el adiestramiento básico necesario para lograr alcanzar y mantener los grados de alistamiento ordenados; todo ello sin olvidar la seguridad del personal y del material. Precisamente en este campo intentamos que una de las áreas de excelencia de nuestras unidades sea la Seguridad Interior, en la que todos los miembros de cada dotación están directamente implicados. Tiene bajo su mando una cantidad importante de unidades y de personal embarcado, ¿supone este hecho una responsabilidad mayor que si se trata del mando de un solo barco? Es evidente que mi mando actual no es exactamente como el mando de un solo barco. Yo no diría que la responsabilidad es mayor sino diferente. Hay que tratar de aunar con un espíritu común a todas la unidades bajo mi mando, pero respetando su idiosincrasia y cometidos diferentes. ¿Cuáles son los ejercicios y operaciones más importantes en los que se encuentran involucradas las unidades del Grupo de Acción Naval 1? De los periodos ya pasados tengo que resaltar la participación de varias unidades en las operaciones «Atalanta», «ocean Shield» y «Active Endeavour». También la integración sucesiva en el Grupo Permanente de la oTAN n.º 2 (SNMG-2) de tres fragatas F-100 como buques de mando durante el periodo de mando español (junio 2013-junio 2014). Y, por supuesto, el hito del despliegue en Australia durante el año 2013 del BAC Cantabria, con el que se pudieron comprobar las excelentes capacidades de este tipo de buques. En el momento de escribir estas líneas, el BAC Patiño y la fragata Canarias se encuentran integradas en el Grupo Permanente de la oTAN n.º 2 (SNMG-2) en aguas del Mediterráneo para la operación “Active Endeavour” durante el mes de febrero. Por su parte, la mayoría de las fragatas F-100 y el BAC Cantabria se están preparando para la realización de un ejercicio de escuadrilla en aguas de Cádiz, en el que colaborarán también varias de las fragatas Santa María. La participación de algunas de estas unidades en el ejercicio es un paso de adiestramiento previo a la calificación operativa que tendrán que afrontar en los meses posteriores. También, este año está prevista la participación de la fragata Victoria en la operación «Atalanta», y la integración de una F-100 en el Grupo Permanente n.º 1 de la oTAN (SNMG-1) como paso previo al mando español de esta agrupación a partir de enero 2016. El hecho de que una de estas unidades, primero fue la F- 103 Blas de Lezo y ahora es la Álvaro de Bazán, se encuentre integrada en el mando de Defensa y operaciones Aéreas (MDoA) ¿repercute en su disponibilidad para las actividades del Grupo 1? ¿Esta integración supone, por otra parte, un incremento de sus capacidades? Evidentemente esta disponibilidad e integración es una actividad importante a tener en cuenta en la preparación del Plan de Actividades anual. Para las unidades supone un reto en cuanto hay que practicar una serie de procedimientos comunes y contar con las redes de comunicaciones y mando adecuadas para la defensa del espacio aéreo español. Pero el que incrementa claramente sus capacidades de respuesta es el Mando de Defensa y operaciones Aéreas, que de esta forma cuenta con una plataforma que le permite ampliar sus posibilidades de control y reacción. En el tiempo que lleva al frente del Grupo de Acción Naval 1 ¿cuáles son las necesidades más perentorias que ha detectado, tanto de orden material como del personal? El personal es uno de los mayores bienes que tenemos en la Armada. A veces es difícil cubrir los huecos específicos que surgen en las unidades y hay que recurrir a la publicación de comisiones para completar las dotaciones en los despliegues, pero la generosidad y el esfuerzo de nuestra gente ayudan a paliar este problema. También, es evidente que las restricciones económicas han conseguido descapitalizar parte de nuestros servicios de repuestos y que a la hora de afrontar las posibles problemáticas por averías del sistema no es tan ágil en la respuesta. Sin embargo, es de justicia señalar que el apoyo y la respuesta de los Arsenales siguen siendo magníficos, y todas las unidades han solventado sus problemas principales, especialmente cuando han estado implicadas en operaciones. 20 BIP
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