Page 284

REVISTA DE HISTORIA MILITAR 112

290 RAQUEL SÁNCHEZ GARCÍA de misas en su recuerdo continuó, aunque en este caso el anuncio del Diario de Avisos hiciera referencia a la muerte de León como “víctima de las discordias intestinas”, y no como víctima de un bando concreto55. José María mantuvo viva la memoria de su padre a través de lo que po-dríamos denominar el fetichismo del objeto, es decir, donando diversos utensilios relacionados con él a instituciones del Estado y a personas de prestigio en la España de la época. Entre estos regalos destaca el del cha-có que llevó el general León hasta el momento de ser fusilado, que fue donado al rey Alfonso XII56. Esta estrategia del recuerdo a través de los objetos había comenzado años antes al ser comprado por un anónimo admirador de León el coche en el que había sido conducido al patíbulo, coche que fue donado en 1853 al Ministerio de la Guerra “para que se perpetuase aquella memoria”. Durante el periodo del general Lersundi en el ministerio, el coche permaneció protegido tal y como se había exi-gido en la donación, pero después se sacó a la intemperie57. La prensa acusó a los siguientes gobiernos de no haberse ocupado de frenar el de-terioro del coche58. Estos gobiernos, aunque no se dice, fueron los del Bienio Progresista, lo cual resulta extraño, ya que entre los ministros de la Guerra en estos años estuvo Leopoldo O’Donnell, uno de los princi-pales implicados en la trama de 184159. Como ya se ha mencionado antes, la vinculación entre la defensa de la Monarquía y la conspiración de 1841 se fue haciendo cada vez más estrecha. El regalo al rey Alfonso supone el fin de un proceso, pero ya anteriormente y de diversas formas, la familia real había manifestado su simpatía por los fusilados y por sus familias. Durante la legislatura 1844-1845 el Senado aprobó varias disposiciones que regulaban la con-cesión de pensiones a las viudas e hijos de varios de los implicados60. En Sección de Personal, caja 16604, exp. 2). Restaurada la monarquía en España, abandonó el carlismo y permaneció vinculado al Ayuntamiento de Madrid en distintos puestos. Murió el 14 de julio de 1888. 55  Diario de Avisos, 14 octubre 1869. 56  El Liberal, 22 octubre 1884. 57  Esta cesión de objetos continuó posteriormente, como prueba la donación de la banda de Isabel la Católica que llevaba Diego de León en el momento de ser fusilado al Museo de Artillería (La Correspondencia, 8 abril 1892). Un listado de los regalos de los descendientes a este Museo en DANVILA CARBONELL, M.: Diego de León, la primera lanza del reino. Visión Libros, Madrid, 2008, pp. 264-266. 58  El Clamor Público, 18 noviembre 1856, que recoge una noticia de La España. 59  O’Donnell fue, precisamente, quien inició el movimiento al pronunciarse en Pam-plona (MIKELARENA PEÑA, F.: “La sublevación de O’Donnell de octubre de 1841 en Navarra”, en Historia Contemporánea, n.º 38, 2009, pp. 239-275). 60  Diario de Sesiones del Senado, 10 mayo 1845.


REVISTA DE HISTORIA MILITAR 112
To see the actual publication please follow the link above