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AEROPLANO 29

Europa del aeroplano Wright, siendo esta la primera vez que veían volar un avión, lo que les causó gran impresión, descrita por el propio Kindelán: Los ya célebres hermanos Wright habían sido contratados por un audaz empresario francés para que hicieran vuelos de demostración. Yo asistí al imborrable espectáculo con mi entrañable amigo Emilio Herrera y la tarde aquella no se me olvidará nunca, fue el 4 de octubre de 1908. La gran maravilla ocurrió ante nuestros ojos y, Herrera y yo, quedamos mudos de asombro. Luego nos mostramos entusiasmados, en fín, casi llorábamos de emoción. Para entender lo que significaba para estos oficiales el maravilloso vuelo que Tras los deslumbrantes vuelos de demostración realizados por Wilbur Wright con su aeroplano en el verano del año 1908 en un improvisado aeródromo1 próximo a Le Mans, muchos ejércitos del mundo intuyeron que aquella maravillosa máquina voladora podía, tener un gran futuro como arma. España, al igual que el resto de los paises, se puso a trabajar para incorporar el aeroplano a sus efectivos pero esto, aunque ya se estaba en ello, no era asunto fácil porque requería mucho tiempo e importantes gastos que deberían ser justificados acababan de presenciar hay que recordar que para ellos, hasta ese momento, el vuelo era imposible porque en las lecciones de física aprendidas en la Academia de Ingenieros de Guadalajara, se les había demostrado la imposibilidad del vuelo mecánico por el razonamiento técnico enunciado como “círculo vicioso de la aerodinámica”. De nuevo en sus destinos, tanto Kindelán como Herrera difundieron entusiásticamente en los ambientes profesionales el milagro vivido lo que, unido a la amplia información recibida, motivó que el Ministerio de la Guerra, que ya se había percatado del potencial del aeroplano, interesara al Gobierno de la Nación obteniendo, por iniciativa de varios senadores, los fondos necesarios para iniciar las primeras gestiones que concluirían con la adquisión del material de vuelo. El día 31 de diciembre de 1908 el coronel Vives, después de hablar con Kindelán, mantuvo una larga entrevista con el general Marvá3, al final de la cual éste accedió a proponer al Ministro que Kindelán y Vives viajaran, como fuera acordado, para estudiar el mercado de los dirigibles y aeroplanos. El día de Reyes, SS MM les dejaron como regalo un extraordinario viaje y así, la noche mágica del día 5 de enero de 1909, a las 20.50 emprendieron la marcha por tren llegando a París el día 7 donde, sin pérdida de tiempo, iniciaron los contactos que les permitirían ver el material aeronáutico que les interesaba, pero esto sería a la vuelta de Inglaterra donde tenían previsto ir primero. Efectivamente, el día 9 continuaron hacia Londres, donde se instalaron, y comenzaron las visitas de trabajo: el Centro Aeronáutico de Farnborough, los distintos fabricantes, entrevistas con miembros de la Federación Aeronáutica Internacional (FAI), una gran recepción en el Ritz el día 12, museos, teatros, el zoológico, Hyde Park, algunas compras y agasajos sin fin hasta el día 16 que regresaron, por Folkestone, a París. En Francia, alojados en el Hotel Louvre, se movieron para conocer el estado 19 en los presupuestos generales del Estado. Muchos ejércitos del mundo intuyeron que aquella maravillosa máquina voladora podía tener un gran futuro como arma > > Primer bombardeo español con “proyectiles de caída para arrojar desde aeroplanos” el 17 de diciembre de 1913. Son bombas “Carbonit” de 10 kg., importadas de Alemania, el avión es un Lohner y los tripulantes son Barrón y Cifuentes (foto: Archivo Histórico del Ejército del Aire).


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