Page 45

AEROPLANO 29

tercio del siglo pasado, compuesta de más de veintiocho mil negativos, mil cien fotografías originales y las máquinas que utilizó, todo ello legado a la Universidad de Navarra y nada a las instituciones (Museo y Archivo Histórico) del Ejército del Aire, al que tanto debía. Don José Ortiz Echagüe falleció en Madrid el día 7 de septiembre de 1980. Pedro Vives y Vich nació en Igualada, Barcelona, el día 20 de enero de1859, e ingresó en la Academia de Ingenieros el mes de junio de 1874. Alférez por buena conducta y por Reglamento fue promovido a teniente en el año 1878 y destinado al Regimiento de Zapadores Minadores de la 4ª Región (Cataluña). Ascendió a capitán en el año 1880 y Afloran por primera vez ideas que han estado siempre presentes en el pensamiento de Kindelán sobre la organización y la utilización de los aeroplanos: independencia hasta el punto de convertirse en Arma; empleo con carácter preferentemente ofensivo y capacidad para adaptarse a los previsibles progresos técnicos. Lo más notable es que Kindelán tuviera ya criterio formado en el año 1912, cuando el Ejército español no había utilizado solicitó el pase al Ejército de Ultramar, siendo destinado a la Comandancia de Ingenieros de la Isla de Cuba, donde se desempeñó con el celo y la capacidad de trabajo que le caracterizó, hasta tal punto que se llegó a decir de él que era un caso patológico de actividad. Agotado por el trabajo y por el clima, en el año 1883, tras un reconocimiento médico, el Capitán General de la Isla le concedió cuatro meses de licencia por enfermo, que disfrutó viajando a San Francisco (California) para tomar las aguas medicinales, a cuyo término realizó un trabajo, sin duda imprevisto, que aceptó disciplinadamente. Puesto que ya él se encontraba en los EE UU, se trataba de pasar por Boston donde, el Museo de Artillería, remitiría valiosas piezas para ser exhibidas en una Exposición que se celebraría en la citada ciudad. Debidamente autorizado, cruzó los EE UU de Oeste a Este en un viaje demoledor hasta Boston, encargándose de la recepción, instalación y custodia de las valiosas piezas, así como de su embalaje y embarque de regreso, todo ello sin dejar de representar dignamente a España, trabajo por el que fue muy elogiado por Artillería y por su propio Mando, con el único inconveniente de haber prolongado dos meses su permiso por enfermedad. A finales del mes de octubre se reintegró a su puesto en La Habana, regresando a la Península mediado el año 1884. Tras la experiencia americana, el destino a la 4ª Región en la Comandancia General de Ingenieros de Cataluña (su tierra) fue como un premio que no duró mucho porque en el año 1887 fue desti- 45 aún sus aeroplanos en misiones ofensivas > > La prensa gráfica de la época publicó las fotos de los pilotos de la primera Escuadrilla Expedicionaria, con algunos fallos notables. Las “ocurrencias” reseñaba como pilotos a Cifuentes y Monasterio cuando Cifuentes era observador y Monasterio sólo era un alumno que causó baja. Faltaba en la lista Luis Moreno Abella. En la foto publicada: Infante, Kindelán, Olivié, Cifuentes, Espé, Alonso Ilera, Ríos, Barrón, Alfonso Bayo, Monasterio y Cortijo. > Alejandro Tiana, primer maestro de taller formado en Guadalajara. Fue el titular en aquella primera Escuadrilla Expedicionaria (foto: cortesía de su hija, Concepción Tiana).


AEROPLANO 29
To see the actual publication please follow the link above