EDITORIAL colaboración en la seguridad de África LA situación de inseguridad y conflicto que sufren algunos países africanos supone hoy una grave amenaza para Europa. Esta situación se manifiesta de diversos modos, como la expansión del yihadismo, el tráfico de personas y drogas y la existencia de flujos inmigratorios incontrolados, que están provocando un drama humano en el Mediterráneo, donde en los primeros meses de 2015 se han ahogado más de 1.700 personas. Nuestras Fuerzas Armadas colaboran diariamente en la lucha contra estas lacras, y por ello recibieron el agradecimiento y la felicitación del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en la visita que el 3 y el 4 de mayo efectuó a las tropas españolas desplegadas en Malí y Senegal. La raíz de la tragedia en la mar, como la que se produjo el 19 de abril cuando murieron 850 personas en un naufragio en la costa siciliana, se encuentra en la pobreza, la desigualdad, la inestabilidad y la violencia de los países de origen, que conduce a muchos africanos a emigrar en busca de un futuro mejor. Mientras no exista estabilidad, la gente seguirá huyendo. En este sentido, es positivo que los Ejércitos y la Armada actúen ya en esos países, así como en los de tránsito de la inmigración. Asimismo, la sinergia de actuaciones entre unidades de los tres Ejércitos, y de éstas con las de la Policía y la Guardia Civil, posibilitan que la acción de España sea más eficaz. Debe destacarse que dos militares españoles ocupan puestos de especial responsabilidad en sendas misiones de la Unión Europea en África: el general Alfonso García-Vaquero manda EUTM Malí y el contralmirante Alfonso Gómez Fernández de Córdoba, desde el pasado 6 de mayo, la operación Atalanta. Igualmente, el coronel Juan José Martín Martín será el segundo jefe de la nueva misión en la República Centroafricana, en la que nuestro país aporta el contingente más numeroso tras el de Francia. También es significativo que una gran parte de estas misiones se dediquen a instruir y adiestrar a los Ejércitos locales, desde el golfo de Guinea hasta el Cuerno de África. Como declaró en Malí el presidente Mariano Rajoy, «para asegurar el futuro de un país es capital que tenga un Ejército con formación y conocimientos». Ayudar a las Fuerzas Armadas y de Seguridad de las naciones más necesitadas a que desarrollen capacidades sostenibles y enseñar a sus componentes a realizar eficazmente sus tareas son una buena manera de procurar la mejora continuada de la seguridad en África, y con ello —en un mundo tan globalizado en el que conflictos aparentemente lejanos acaban siendo muy cercanos— la paz, la estabilidad y la libertad de los españoles. RED Mayo 2015 Revista Española de Defensa 5
REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA 317
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