la autonomía total podría lograrse solamente cuando la Inteligencia Artificial (AI) haya sido desarrollada e implementada hasta el punto que pueda ofrecer respuestas fiables y adecuadas a los altamente complejos y exigentes requisitos operativos; objetivo que probablemente no se logre aún en la próxima década. Mientras tanto, aunque la innovación tecnológica permitirá mayores grados de autonomía, el entorno político y militar en Europa probablemente continúe dando una mayor importancia al control humano y supervisión de las actividades de los UAS. El riesgo, objeto de crítica, asociado a la potencial automatización de los UAS es que la misión del piloto podría limitarse a la conducción remota de la misión, un tipo de supervisión en la que los UAS podrían ejecutar la misión automáticamente, incluídas las decisiones tácticas. En Estados Unidos aunque parece comprenderse la rápida expansión de los UAS en los inventarios de sus fuerzas, existe un claro recelo en cuanto a aceptar la total automatización de los UAS, por lo que se apoya el concepto “Man in the Loop”. En Europa, el entorno militar tiende a confiar menos sistemáticamente en soluciones tecnológicas que sus socios americanos, siendo incluso más escéptico en este sentido. Es probable que esta actitud precavida de los entornos tanto militar como civil limite la futura utilización autónoma de los UCAS por las Fuerzas Armadas Europeas. FUTURO DESARROLLO UCAS Los UCAS tienen potencial para ofrecer una innovativa batería de opciones, aportando ventajas al poder aéreo en cuanto a nuevas misiones, disuasión táctica y, no menos importante, ahorros en los costes de su ciclo de vida. Los UCAS quizás sean capaces finalmente de ejecutar una gama completa de misiones y operaciones defensivas y ofensivas, incluyendo ISTAR, AAR, CAS, SEAD, Interdicción, que permitan el control del aire en su totalidad. Los UCAS pueden ofrecer ventajas técnicas, como la reducción de la firma radar y la capacidad de transportar una amplia carga de pago. También pueden aportar mayor permanencia, proporcionando persistencia y disponibilidad, y sin tripulación, lo que permite operar en un entorno de alto riesgo. Aunque la supervivencia de la tripulación es sin duda un factor importante, es cuestionable si influirá decisivamene en la decisión sobre el desarrollo de UCAS. El elemento humano operando aviones de combate de altas prestaciones ha tenido que luchar con las restricciones fisiológicas que el vuelo de alta altitud y fuerzas gravitatorias ponen sobre el cuerpo humano. Mitigar los efectos en 874 «En Estados Unidos aunque parece comprenderse la rápida expansión de los UAS en los inventarios de sus fuerzas, existe un claro recelo en cuanto a aceptar la total automatización de los mismos»
REVISTA DE AERONAUTICA Y ASTRONAUTICA 828
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