La Unión Europea, por su parte, decidió crear un puente aéreo —en funcionamiento desde el 10 de octubre— para transportar y evacuar no sólo enfermos, sino también personal sanitario y material humanitario. El puente aéreo (organizado por el Centro Europeo de Coordinación de Respuesta ante Emergencias) incluirá traslados en el interior de los países afectados para colaborar con las Naciones Unidas en las labores de distribución de la ayuda. También decidió coordinar todos los esfuerzos nacionales y designar al nuevo comisario de Ayuda Humanitaria, Cristos Stiliniades, como responsable especial para el ébola. En una reunión extraordinaria celebrada el 23 de octubre, los jefes de Estado y Gobierno europeos pactaron duplicar los fondos que destinan a combatir la enfermedad De izqda. a dcha., soldados estadounidenses de la operación Asistencia Unida; el jefe de UNMMER, Anthony Banbury, en un hospital de Médicos sin Fronteras en Liberia; y un avión de la ONU en Freetown, capital de Liberia, con equipos para la misión contra el ébola. hasta alcanzar un monto total de 1.000 millones de euros. También se ha decidido organizar el próximo 14 de diciembre una cumbre extraordinaria en la que los líderes europeos abordarán cómo implementar un plan de apoyo integral (se baraja la opción de una misión específica) en el que se pretende aportar asistencia humanitaria, técnica, financiera e, incluso, militar. REPERCUSIÓN GEOGRÁFICA La enfermedad hemorrágica inducida por el ébola no es nueva. El primer brote apareció en 1976 de forma simultánea en la República Democrática del análisis internacional Congo (entonces Zaire) y Sudán del Sur, ocasionando 280 y 151 víctimas respectivamente. En los años siguientes, ha habido un total de 20 brotes que además de esos países, afectaron a Gabón y Uganda. Pero siempre se trataba de aldeas aisladas con lo que el control resultaba relativamente fácil y la propagación era mucho más lenta. En diciembre de 2013 murió en Guinea la primera persona del actual brote, pero no fue hasta marzo de 2014 cuando las autoridades sanitarias de ese país confirmaron ya 59 muertos y que se trataba de ébola. En abril, la Organización Mundial de la Salud anunciaba que los casos aumentaban un 60 por 100 a la semana en Guinea y la epidemia se expandía por las ciudades sin control. En mayo, Sierra Leona confirmó su primer fallecido por ébola. La epidemia ya era incontrolable. Según un estudio del Instituto de Medicina de las Academias Nacionales de Estados Unidos hay 13 factores que influyen en el grado de emergencia de una enfermedad infecciosa. Al menos seis de ellos están incluidos en el actual brote de ébola: variación y adaptabilidad de los microbios, demografía y comportamiento humano inadecuado, viajes internacionales y comercio, quebrantamiento de las medidas de salud pública, pobreza y desigualdad sociales, y falta de voluntad política. En este último aspecto, la OMS ha denunciado de forma reiterada que hasta que no comenzaron los contagios de ciudadanos occidentales y las grandes potencias no se vieron amenazadas no se iniciaron proyectos serios de investigación contra el virus. Es más, la crisis económica de los últimos años había motivado una reducción en la asignación que cada país hace a la Organización Mundial de la Salud y sus proyectos sanitarios. Además del evidente drama humano, hay otro factor importante que está surgiendo con la actual epidemia. La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PAM) han demostrado en sendos estudios que cinco países africanos afectados padecen un serio riesgo de seguridad alimentaria. La interrupción de las actividades comerciales por el cierre de fronteras, la cuarentena a la que han sido sometidas provincias enteras, la escasez de algunos productos de primera necesidad y el abandono de cosechas están generando situaciones de escasez que pueden ocasionar hambrunas e inestabilidad. La alteración del comercio está provocando subidas de precios de productos básicos como el aceite de palma y el arroz. Como insistió Ban Ki-Moon en la reunión especial sobre el ébola en las Naciones Unidas «no estamos solo ante una necesidad sanitaria, se trata de entender que el futuro de cientos de miles de personas está en nuestras manos». Rosa Ruiz La situación económica y política del área exige un tipo de misión que garantice la estabilidad y los servicios mínimos Diciembre 2014 Revista Española de Defensa 55 Andre Dakis/USAC Ari Gaitanis/UN Ari Gaitanis/UN
REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA Nº 312 DIC 2014
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