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LA LEGION 535

Actividades << nº 4 por enemigo que hizo 7 disparos lamentando muerte del legionario Salvador Baltasar Queija habiéndose consumido diez cartuchos”. Tras la escaramuza, el riotintense yacía en el suelo, aún con vida aferrando el fusil contra su cuerpo ensangrentado. Fue evacuado por sus compañeros hasta el campamento, donde acabaría falleciendo. Tenía 18 años. Posteriormente, recibió cristiana sepultura en el cementerio católico del Zoco el Arbaa, en la zona de Tetuán. Noventa y cinco años después de este acontecimiento, el Ayuntamiento de Minas de Riotinto hizo un llamamiento a La Legión del siglo XXI para que fuera partícipe del homenaje que sus vecinos querían tributar a su paisano Baltasar. La Unidad no lo dudó un instante: estaba decidida a presentarse ante el Consistorio Municipal para demostrar que La Legión no abandona jamás a uno de los suyos, vivo o muerto. En la mañana del 8 de abril, la Escuadra de Batidores del Grupo de Caballería “Reyes Católicos” II y la Banda de Guerra del 4º Tercio “Alejandro Farnesio” y del Grupo de Caballería de La Legión, se desplazaban en autobús desde Ronda hasta Minas de Riotinto, donde, nada más llegar, a los sones de la Banda de Guerra, la Escuadra de Batidores realizó una exhibición de movimientos que hizo las delicias de una plaza del Ayuntamiento abarrotada de gente, y que concluyó con unas palabras gritadas al unísono, premonición de lo que se avecinaba: “A 180 pasos por minuto y un solo corazón, como un huracán de guerra desfi la La Legión” Efectivamente, dispuesta la Unidad para el desfi le, se dio inicio a un desfi le que fi nalizó en la Plaza de La Rábida. Durante el trayecto, Escuadra y Banda continuaron deleitando a todos los presentes, los cuales vitoreaban el paso decidido de los legionarios rondeños. Tras la inauguración de un monolito honorífi co en dicha plaza, tomó la palabra el señor Chaparro Queija, sobrino del homenajeado, tras el cual el Coronel Jefe del 4º Tercio D. Julio Salom Herrera y la Alcaldesa de la localidad Da. Rosa Ma.. Caballero pronunciaron sendos discursos, siendo de destacar el de ésta última, cuyas sentidas palabras fueron una muestra más de honra a la memoria de su ilustre vecino, y por ende a la labor que La Legión, de ayer y de hoy, ha venido realizando en pro de los intereses de España. Tras las alocuciones, se izó la Enseña Nacional a los acordes del Himno Nacional y se rindió homenaje a aquéllos que dieron su vida por España. Durante la ofrenda fl oral en el nuevo monolito y tras la oración del capellán castrense, un silencio sepulcral invadió el entorno, sólo roto cuando los legionarios comenzaron a entonar “El Novio de la Muerte”, ese himno, casi místico, cuya inspiración se atribuye a unos versos hallados entre los ropajes del propio Queija Vega. Versos, fruto tal vez, del despecho por un amor no disfrutado por el capricho del destino. Tampoco podía faltar “La Canción del Legionario”, ni los Espíritus del Credo, introducidos por el Coronel del 4º Tercio de una manera especial a lo largo de su discurso para que, como él mismo dijo: “… podamos conocer en los legionarios de este siglo cómo era su paisano a través del Credo…”. Por último, un desfi le militar ante las autoridades y vecinos del lugar daba por fi nalizadas todas las celebraciones llevadas a cabo a lo largo de esa intensa mañana. La muerte de Baltasar Queija Vega puede ser entendida desde una doble perspectiva contrapuesta a todas luces. Por un lado, tenemos la desgracia familiar por la pérdida de un ser querido. De otro, encontramos el halo romántico ya que éste es el momento en que dará comienzo la leyenda que ha rodeado desde entonces al primer caído en combate en las fi las del Tercio de Extranjeros. En este 8 de abril de 2016, ambos aspectos se fundieron en un todo, y los vecinos de Minas de Riotinto sintieron la necesidad de hacer protagonista por un día a ese joven riotintense, que huyó a Tenerife buscando ventura y lo que encontró fue gloriosa muerte en tierras africanas cumpliendo como bravo legionario. Grupo de Caballería “Reyes Católicos” La información sobre Baltasar Quija Vega ha sido recopilada del artículo: García Moya, Antonio. Subteniente de Infantería Ligera (2012): “Baltasar Queija Vega, el primer muerto de La Legión”. Revista Ejército, nº 857, pp. 106-113. Madrid. 535 · II-2016 29 La Legión


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