Page 113

REVISTA DE HISTORIA MILITAR EXTRA COLEGIO ARTILLERIA

EL REAL COLEGIO DE ARTILLERÍA. DE LA FUNDACIÓN A... 113 que se percibió peor, que perjudicaban al buen funcionamiento de la vida académica del centro. Se alteraron los principios orgánicos del Colegio y lo que parecía peor, se iban a ver afectados los principios académicos que habían consolidado el prestigio de la academia segoviana. La vía reservada y directa con la Secretaría de Guerra que se articuló desde la fundación, funcionó y lo hizo como debía abortando unos procedimientos viciados y no reglados, actuando como supervisor del Real Colegio, velando desde un plano superior administrativa y militarmente, como se hizo desde 1764. La crisis de 1801 se manifestó tras dos situaciones de guerra, la de los Pirineos y la de Portugal o de las Naranjas y, detectada desde la Secretaría del Despacho fue abortada tomando medidas tajantes para que el Colegio, tan consolidado como centro científico–militar, no se desviara de la hoja de ruta marcada por Gazola y los implicados en la fundación desde 1764. A modo de balance y a la luz de la documentación consultada, bien se puede afirmar que de la crisis salió reforzado el “Espíritu de la Ordenanza”, ese texto vertebrador del Colegio segoviano, su cumplimiento dio conti-nuidad a los principios organizativos, militares y científicos del centro y lo preservó de situaciones valle. Con la crisis de 1801 y su superación “expres” salió fortalecido el Colegio, pues se renovaron los votos para salvaguardar el espíritu de la Ordenanza de 1768 y del ideario académico gazoliano. De la misma forma, el mantenimiento de la vía reservada con la Secretaría del Despacho de la Guerra que tan sabiamente providenció Gazola y el equipo italiano en los años de la fundación, demostró su eficacia y razón de ser, como supervisor de un centro de enseñanza modélico ya entonces, tanto desde el punto de vista científico como del militar. Los sólidos cimientos sobre los que se construyó la arquitectura del colegio artillero con Carlos III y Gazola se demostraba que seguían siendo imprescindibles al inicio del XIX como garantes del prestigio y funcionamiento del centro. Así, en 1801 se renueva la Ordenanza de 1768 como libro sagrado, texto medular de la estructura, régimen interior y buen funcionamiento académi-co del Colegio y, desde la Secretaría del Despacho, se puso el foco en los artículos y títulos de la Ordenanza que se estaban desvirtuando para volver a las normas fundacionales. Su titular, Don José Antonio Caballero, escribió este oficio al Comandante General de Artillería con un conjunto de órdenes claras y tajantes como por ejemplo: “El Consejo, cuyo único presidente es el Director del Colegio Mi-litar, compuesto del Comandante del Departamento, de los oficiales de la Compañía y de los dos primeros profesores de su Academia estará encargado del régimen interior, gobierno y disciplina del esta- Revista de Historia Militar, I extraordinario de 2014, pp. 73-134. ISSN: 0482-5748


REVISTA DE HISTORIA MILITAR EXTRA COLEGIO ARTILLERIA
To see the actual publication please follow the link above