La hemoterapia en el ámbito militar español ha gozado de prestigio desde su nacimiento, sobresalen los bancos de sangre creados, en ambos bandos, durante la contienda civil, donde personalidades como los doctores Durán Jordá o Carlos Elósegui destacan sobremanera. Continuando esta senda marcada se crea en 1952, en las instalaciones del Instituto de Medicina Preventiva Ramón y Cajal, el Servicio Central de Hematología y Hemoterapia del Ejército, que tras diversas vicisitudes, entre las que cabe destacar su paso por el Parque Central de Sanidad Militar y Hospital Gómez Ulla o la inauguración de nuevas instalaciones en el recinto del Hospital Militar Gómez Ulla en mayo de 1991, culmina con su transformación, el 17 de marzo del 2007, en el Centro de Transfusión de las FAS (CTFAS). Queda posteriormente integrado en la Red Sanitaria Militar, bajo la dependencia orgánica de esta Inspección General de Sanidad y con la finalidad de garantizar la “autosuficiencia en sangre y hemoderivados de las FF. AA. y la seguridad del donante y del receptor allí donde se hallase”.
Agotado