4142. Autocríticas republicanas

HISTORIA MILITAR DE LA GUERRA CIVIL EN MADRID - FUENTES PRIMARIAS -

Autocrítica republicana de su Aviación Enero 37. Informe Crítico de la CNT, sobre el Arma de Aviación, y Propuesta de renovación de la Cúpula Aérea republicana Informe que rinde el Comité Central de la CNT del Arma de Aviación, sobre la actuación moral y material del Mando de dicha Arma desde los comienzos de la sublevación fascista, al Comité Regional de la FAI (Barcelona). AGGC, PS Barcelona, B13, Expediente 2, F1 a 11 (Extracto del Informe) Son numerosos los errores, traiciones, torpezas y sabotajes que el alto mando de Aviación ha cometido. Este Comité acusa de haber destruido la moral de las fuerzas aéreas a los mandos que han llevado la dirección de la Campaña y que, al mismo tiempo, anularon la imponente superioridad de medios materiales con que contaba la Aviación Republicana, que hubiera permitido, si no inclinar decididamente la guerra a nuestro favor, por lo menos la anulación absoluta de la potencia aérea del adversario. El Coronel Pastor es el ejemplar típico de arribista sin escrúpulos; ha sido Jefe Superior de Aeronáutica con la Monarquía y con la República. Ha desempeñado y mantenido dicho cargo con los Gobiernos de Lerroux, Samper, Rocha, Casares, etc. Algunos de los hombres que formaron su equipo fueron: - Barrón, encargado del Sector de Navalperal, fue fusilado por traidor. - El Capitán Alorda se fugó en avión, a los 40 días de guerra, desde Lozoyuela, con el Capitán García López. Ambos el mismo día que desertaron, bombardearon el aeródromo de Cuatro Vientos. La Jefatura de Aviación estuvo integrada por Pastor, La Roquet, Sampil Jácome y Delval, con más de 15 años de experiencia. Las órdenes de operaciones revelan no ignorancia sino mala fe manifiesta. Por ejemplo, a un caza Neuport, cuya velocidad de crucero es de 180 kms/hora y cuya autonomía es de escasas dos horas, se le dio orden de que saliera para Llanes, pero el piloto se negó a prestar el servicio. A un Breguet, en muy mal estado, se le ordenó un reconocimiento hasta Logroño, regresando por Valladolid y Segovia. Al Teniente Versoni se le ordenó salir para Burgos, Valladolid, Zamora, Guadarrama, Soria, Almazán, Valladolid, Medinaceli, Zaragoza y regreso lo que suponía cuatro horas y media en el aire por terreno enemigo, con un aparato en malas condiciones. Con este tipo de órdenes se perdieron cuatro aparatos y cuatro equipos. Repetidas veces se ordenó que un solo aparato de caza fuera a efectuar reconocimientos, a largas distancias, y en todas ellas salieron al paso varios aparatos enemigos. Este fue el caso del Capitán Abortano. Una vez que la aviación revolucionaria estuvo en posesión de bastantes medios, contando con una considerable flota de polimotores, no se empleó, como la técnica más elemental aconseja, de forma masiva, sino que se fue perdiendo en misiones aisladas, sin provecho alguno para la Causa. Se ordenaba que un aparto fuera a Irún, Ferrol o Cádiz comprometiendo el material y el equipo en una misión absolutamente ineficaz, ya FUENTES PRIMARIAS No está permitida la reproducción total o parcial de este documento por ningún medio, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright 2224

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