Page 56

BOINA NEGRA 275

VETERANOS PARACAIDISTAS SIMON, EL FOTÓGRAFO DE LA BRIPAC IN MEMORIAN Sgto. 1.º Álvaro BCG/G-9 El Cap. Cándido y Simón, depositan la corona de flores en el acto a los caídos de la Parada Militar del 23 de febrero de 2013 ofreciste, conseguiste el cariño de tantos paracaidistas que han desfilado por nuestras unidades. En el último encuentro de veteranos, he de confesarte que aunque ya estabas enfermo y no pudiste asistir a dicho encuentro, nuestros veteranos los que asistieron en su gran mayoría, llevaban una foto tuya de su paso por la Brigada. Quiero mencionar que si hubo una persona ajena a mi familia y allegados que más se alegro cuando me presente de Suboficial, fuiste tú, porque en aquella época, aparte de fotógrafo y de amigo, también ejercías de padre de muchos de nosotros. Quiso el destino que en la última patrona a la que asististe, te escogiera yo para depositar la ofrenda de la corona a nuestros caídos por España, fue tu último acto de servicio a la Brigada Paracaidista, a tu Brigada. Imagino que nuestro Dios y jefe nuestro te tiene ya de servicio en la zona de lanzamiento celestial, te has reunido con tus otros paracas. Si ya es un honor y un privilegio llevar tantos años aquí, todavía lo hace más emotivo, el haberte conocido y haber disfrutado de tu amistad. Gracias, Simón por tantas fotos y tantos recuerdos grabados. Hasta siempre, viejo amigo. Una parte de mi vida militar está plasmada en las fotos que me hiciste. Cuando en el año 1982 me incorpore a la 13 compañía y en mis primeras maniobras apareciste vestido de paracaidista, cámara en mano y una gran bota de vino, los veteranos que nos precedían nos dijeron... ese es Simón, el fotógrafo de la Brigada y con tu simpatía y naturalidad nos hacías fotos y en seguida nos hicimos amigos tuyos. Y como no te contentabas con hacernos fotos en territorio nacional, cogías coche, carretera y manta y te presentabas donde allí estuvieran tus “paracas”. Y te importo bien poco perder dinero, por el simple hecho de hacerle una foto a cualquier paracaidista que te la pidiera. Más ardua y difícil era la tarea de cobrarnos las fotos, a todos nosotros que cobrábamos paga en mano y te las ingeniabas para entregar todas las fotos al final de cada mes, las grandes y pequeñas que nos habíamos hecho durante las maniobras y saltos. Pero en alguna ocasión no solo hiciste de fotógrafo, también de salvador de nuestra sed y hambruna, porque en tu viejo carro jeep amarillo (creo recordar), llevabas un economato para socorrer a tus paracas. Y a fuerza de ese pundonor, de ese coraje y de esa dedicación constante que nos 57


BOINA NEGRA 275
To see the actual publication please follow the link above