45 Instrucción y Empleo La Artillería Antiaérea Cañón “Elemento irrenunciable” por D. Claudio Alfonso Domínguez Saucedo, capitán de artillería Siendo conscientes que el futuro de nuestra AAA debe estar fundamentado en unos sistemas de misiles modernos y capaces, no cabe duda de que los sistemas de cañones seguirán proporcionando unas capacidades complementarias que permitirán hacer frente a una amenaza aérea cada día más compleja y diversificada, allí donde los primeros puedan presentar mayores limi-taciones. Estas capacidades añadidas constituirán un elemento irrenunciable dentro del complejo entramado de la DA del futuro. ANTECEDENTES La primera aparición de armas específicamente empleadas con una finalidad antiaérea ocurrió du-rante la Guerra Franco-Prusiana, en 1870. Tras el desastre de Se-dán, durante el sitio de París por las tropas prusianas, los refuer-zos franceses rodearon a su vez el asedio para romperlo. Las fuerzas francesas del exterior de la ciudad comenzaron a intentar reaprovi-sionar a sus compatriotas sitiados a través de globos aerostáticos. Krupp modificó un cañón de 20 mm para montarlo en la parte su-perior de un carruaje de caballos, con el propósito de derribarlos. Dado lo temprano de esta etapa de la historia, quizá no es tan sor-prendente que fuera únicamente Alemania la nación donde se conti-nuara la creación de las armas anti-aéreas (AA). Parecía que otros países habían ignorado casi por completo la posibilidad de que las aeronaves se convirtieran en una parte impor-tante de las hostilidades, pero esto cambió pronto cuando los aviones de reconocimiento alemanes co-menzaron a volar ayudando a in-crementar la precisión del fuego de la artillería y a ser usados contra objetivos terrestres. Rápidamente
MEMORIAL ARTILLERIA JUN 2014
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