Page 62

EJERCITO DE TIERRA SEPTIEMBRE 2016

INTRODUCCIÓN Los antecedentes de la lucha contra los artefactos explosivos improvisados en España Juan Enrique Gómez Martín. Coronel. Ingenieros. DEM Hablar en España de la lucha contra los «artefactos explosivos improvisados» (IED, por sus siglas en inglés) o, más vulgarmente contra las bombas, nos trae el triste recuerdo del grupo terrorista ETA. En los años aciagos de atentados habituales de ETA, nuestros TEDAX (Técnicos en Desactivación de Artefactos Explosivos) de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado aprendieron todas las técnicas necesarias para neutralizar de la forma más segura todo tipo de siniestros artefactos, en muchos casos a costa de sus vidas, lo que los situó al más alto nivel del mundo, quizás solo comparables con los de Irlanda del Norte y, por desgracia, debido a las mismas razones. Pero nuestras fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado sabían que solo con los TEDAX nunca acabarían con el terror de estos artefactos; la lucha sobre los artefactos hacía que los terroristas diseñaran otros tipos diferentes cada vez que los TEDAX encontraban un procedimiento seguro de neutralizar los anteriores. Era el típico sistema de acción-reacción que nos hacía ir siempre un paso por detrás de los terroristas. Los que vivieron esos años recuerdan fácilmente cómo, cuando todos los organismos habían instalado un escáner para la correspondencia de entrada, los terroristas dejaban de enviar paquetes bomba y cambiaban su modus operandi a las bombas lapa, hasta que en todas las entradas de las instalaciones oficiales se chequeaban los bajos de los vehículos con espejos detectores de bombas, y así sucesivamente. Fue necesario complementar y orientar el esfuerzo de las acciones anteriores hacia la lucha contra las redes que hacían posibles los ataques terroristas. La acción coordinada contra las redes 62  REVISTA EJÉRCITO • N. 905 SEPTIEMBRE • 2016 de financiación, de abastecimiento de explosivos y productos, de reclutamiento de terroristas, de almacenamiento y transporte, emplazamiento, etc., era el único camino para acabar con los atentados con explosivos. Fue una labor en la que la Inteligencia jugó un papel esencial y en la que fue necesario no solo conocerlo sino poder probarlo. Se hizo necesario recoger todo tipo de evidencias, analizarlas y asociarlas a un hecho delictivo o persona para poder utilizarlas legalmente en la derrota de la red terrorista. Equipos de recogida de evidencias, de seguimiento, grabación, etc., alimentaron diferentes laboratorios de análisis de muestras, y posteriormente bases de datos de inteligencia, que al cruzarse dejaban al descubierto a los terroristas y sus elementos de apoyo y, lo más importante, aportaban las pruebas para su enjuiciamiento. Respecto a nuestras Fuerzas Armadas, fue en esta época también en la que comenzaron a crearse las primeras unidades de TEDAX sobre la base, en principio, de artificieros militares, para poco a poco, y con la experiencia de los TEDAX de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, crear la nueva especialidad de desactivación de explosivos o TEDAX, como se llamó inicialmente. EL CONCEPTO CONTRA ARTEFACTOS EXPLOSIVOS IMPROVISADOS (C-IED) Si a lo descrito en el párrafo anterior le unimos el entrenamiento de la fuerza para luchar contra los IED, nos encontramos con el concepto C-IED (Counter improvise explosive device) de la OTAN. En efecto, el artefacto o IED es posible debido a un grupo de actividades adversarias; es el resultado de una operación planeada en la que intervienen


EJERCITO DE TIERRA SEPTIEMBRE 2016
To see the actual publication please follow the link above