Y después de la Jura Por Jeam Sí, es cierto, ya hemos jurado Bandera. Se siente tanta emoción, tanta impaciencia…. ¿Y ahora? La dicha de ser caballeros de la Patria sobresale sobre cualquier apreciación. Al besar esta bandera nos hemos consagrado por entero a nuestro hermosos deseo de servir a España, hemos conseguido entrar dentro de la gran familia militar. Aquello que soñábamos de niños, siguiendo con el pie la marcha militar de los desfi les. Aquello que ansiábamos viendo a nuestros padres lucir sus medallas tan duramente ganadas. Aquello, en fi n, por lo que luchamos cuando ya éramos hombres con la justa esperanza de coronar nuestra ilusión, lo hemos logrado hoy. Hoy por fi n ha llegado el momento de nuestra consagración, de nuestro espaldarazo militar. Parece un sueño…. Rememoro ahora todas las luchas, los fracasos, los momentos de desilusión y también los de optimismo, los de descanso feliz. Aquel Boletín Ofi cial, aquel ofi cio y… ¡la ilusión conseguida! Luego la llegada, el mundo nuevo, el nacimiento a la vida castrense. Tanto se había hablado y luego todo es distinto pero hermoso. Y poco a poco trepar la cuesta, un poco más… Y ahora… ¡Qué felicidad! ¡Qué entusiasmo! Ahora comprendo perfectamente el espíritu que guiaba a aquellos héroes de todas nuestras guerras, ahora siento verdaderamente ese espíritu militar que infundio ánimos a los defensores de Sagunto y de Numancia, a los vencedores de los Incas y a los miles de hombres que han dejado su sangre en los campos de España en defensa de su Bandera y de su honor. Pero no ha terminado todo. Esto no es el fi n. Esto es un principio. Mi ilusión estriba en que es un bello principio. Ahora seguirá la vida académica. Será dura y quizá en algunos momentos penosa, pero puede ser que tenga más fuerzas para vivirla porque estoy cumpliendo con algo muy hermosos que he prometido. Y un militar nunca debe faltar a su palabra. Esto lo aprendí desde muy niño cuando, con la 36 Armas y Cuerpos Nº 131 gorra de mi padre sobre los ojos, soñaba ya con estrellas y desfi les. Ahora he contraído ese invisible pero poderosos lazo que me une en monumental triángulo con mi Dios y con mi Patria y me siento orgulloso de ello. Solo espero no defraudarlo. Voluntaria y conscientemente he llegado hasta aquí, hasta este patio que han pisado tantos héroes y he jurado ante Dios y ante los hombres defender mi Patria sobre todas las cosas. Y soy feliz Quizá una serena noche de verano, sin sueño, recuerde este día y vea en lo alto, en la estrella Polar, un objeto conocido, nuestra bandera y de alguna parte salga una canción quizá aquella que dice “Honor y gloria de la raza….” Nota histórica, en aquellos años la jura de Bandera se realizaba en diciembre, y no en octubre como ahora.
ARMAS Y CUERPOS 131
To see the actual publication please follow the link above