783 te impiden tener café, ir bien vestido y saber lo que es la felicidad …. Mi objetivo es que consumáis hasta el fondo vuestra libertad». A finales de julio de 2016, 800 jóvenes15 se habían sumado ya a estas promesas de libertad de Kamuina Nsapu. En la noche del 21 al 22 de julio de 2016, los seguidores del jefe tradicional incendian una subcomisaría a 20 kilómetros de la localidad de Tshimbulu armados con machetes, palos y fusiles de caza de fabricación artesanal. La milicia que ya se presentaba con el título de su líder —Kamuina Nsapu— empieza a erigir barricadas, atacar a los símbolos de la autoridad política y religiosa y a robar armas a la policía. La revuelta germina definitivamente el 12 de agosto de 2016. Según el relato oficial, ese día un enfrentamiento entre la policía y militares en Tshimbulu termina con la muerte de 11 agentes y varios milicianos, entre ellos el propio Jean-Pierre Pandi. La versión de los partidarios de jefe tradicional es diversa. Dicen que Kamuina Nsapu había aceptado rendirse con la condición de entregarse a los cascos azules de la ONU, pero que las autoridades le tendieron una emboscada, lo ejecutaron y emascularon su cadáver llevándose después sus restos. Esta muerte que seguramente pretendía descabezar esta revuelta atizó la rabia de los Kamuina Nsapu. Sobre todo porque, en ausencia del cadáver del jefe tradicional, que no fue entregado a la familia, muchos de sus seguidores siguieron pensando que su líder estaba vivo o bien que su espíritu los dirigía desde el más allá, una creencia basada también en los poderes sobrenaturales que la tradición atribuye a estos jefes en Congo. De hecho, una de las características de esta milicia es precisamente su fuerte componente místico. Al igual que otros grupos armados en la RDC, como los Mai-Mai o los Bundu dia Kongo, los Kamuina Nsapu se someten a rituales de iniciación y a prácticas supuestamente mágicas que creen les vuelven invencibles e inmortales incluso frente a las balas. Los fetiches con los que se adornan y rituales extremos como el que, según algunos testigos, les lleva a beber la sangre de sus víctimas16, conforman «un pacto psicológico muy fuerte con el grupo». Esta fuerte identificación con el grupo y su creencia en poderes sobrenaturales constituye una ventaja comparativa frente a unas fuerzas militares y de seguridad poco 15 Op. cit. 10. 16 Op. cit. 12. bie3 ZŽŶŐŽ͗ůĂŐƵĞƌƌĂĐŽŶƚƌĂůŽƐ<ĂŵƵŝŶĂEƐĂƉƵ͕ƵŶƐşŶƚŽŵĂĚĞůĂ ĚĞƐĐŽŵƉŽƐŝĐŝſŶĚĞůƉĂşƐ dƌŝŶŝĚĂĚĞŝƌŽƐ ŽĐƵŵĞŶƚŽĚĞKƉŝŶŝſŶ ϲϯͬϮϬϭϳ ϴ
BOLETIN IEEE 6
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