Coronel Juan José Martín Martín «España ha ganado un merecido prestigio en Centroáfrica» Jefe del contingente español hasta el pasado julio, afirma que la seguridad ha mejorado y que progresa el proceso de paz DESDE mayo de 2014 efectivos de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Civil han participado en las dos primeras operaciones que lanzó la Unión Europea para estabilizar la República Centroafricana, primero EUFOR RCA y, después, EUMAM RCA. Al frente de estos contingentes ha estado el coronel Juan José Martín Martín, que también ha sido el Jefe del Estado Mayor Multinacional. —¿Qué balance hace de lo conseguido por las misiones de la Unión Europea, EUFOR RCA y EUMAM RCA? —Muy positivo, y es una apreciación que se hace en los mismos términos por la comunidad internacional y las autoridades locales. La primera operación, EUFOR RCA, centrada en los dos distritos más sensibles y violentos de la capital, Bangui, el 3º musulmán y el 5º cristiano-animista, contribuyó decisivamente a detener la espiral de violencia en que el país había entrado con el conflicto entre los grupos armados Exseleka y Antibalaka, y a devolverlo al sendero de la paz. Tras EUFOR RCA, la misión de asesoramiento EUMAM RCA ha permitido guiar y apoyar a las fuerzas armadas centroafricanas en los primeros pasos de su reconstrucción y reforma, imprescindibles para transformarse en las fuerzas armadas profesionales y representativas de toda la población que el país necesita. Es un proceso de largo recorrido, que ahora es seguido por la misión EUTM RCA. —¿En qué situación se encuentra del ejército centroafricano? —Está empezando ahora a salir, poco a poco, del abandono en el que cayó a causa de la crisis. Está reconstituyendo sus unidades, por lo que su nivel de preparación es mínimo. Necesitará de tiempo y de un esfuerzo sólido y sostenido para recuperarse, incluyendo la renovación de su personal. Afortunadamente, la oficialidad sí está más preparada, pues se ha formado y perfeccionado en diversos países en el extranjero. —¿Qué labores ha tenido encomendadas el contingente español? —Tanto en EUFOR como en EUMAM, ha constituido una aportación valiosa. En la primera aportamos el componente de operaciones especiales, que ha resultado determinante para el éxito de la misión al estabilizar una zona tan sensible como era el 3º distrito musulmán de la capital. Es en gran parte gracias a ello que España ha ganado un merecido prestigio en la Republica Centroafricana. En EUMAM ha asegurado la protección de los asesores y de la misión en general. Ha extendido excepcionalmente esa protección a la delegación europea en Bangui cuando las condiciones de seguridad lo han requerido, incluyendo la evacuación de su personal, como fue el caso con la ola de violencia que asoló Bangui en septiembre de 2015. En ambas misiones, España ha tenido el segundo jefe y jefe de estado mayor, y oficiales de estado mayor en puestos de responsabilidad. —¿Cómo han sido las condiciones de vida para las fuerzas europeas? —Han sido austeras, pero han evolucionado radicalmente, y para bien, desde el primer despliegue provisional que se realizó en mayo de 2014 en condiciones muy básicas, hasta el día de hoy, con el contingente alojado en contenedores en la base UCATEX donde tiene sus necesidades básicas cubiertas. Lo limitado del espacio disponible en esta base, y lo volátil de la situación de seguridad durante todo este tiempo, han contribuido a esta austeridad. —¿En qué ha cambiado el país en estos dos años y medio? —Se ha logrado hacer la transición desde la situación de conflicto abierto, de guerra civil, existente a finales de 2013, hasta hoy, con una nueva constitución aprobada en referéndum, y con un presidente y unos representantes políticos elegidos en las urnas. Pese a las muchas imperfecciones que ha tenido este proceso, ha supuesto un logro sin precedentes para el país, cuya historia está jalonada por golpes de Estado. Es solo un primer paso, al que debe seguir el desarme y la desmovilización de los integrantes de los grupos armados, así como su reintegración en la sociedad o su repatriación a sus países de origen si se trata de extranjeros, si queremos que la paz se consolide. —¿Crée que la población percibe una mejora en sus condiciones de vida y en su seguridad? —Sí. La población civil se está beneficiando de esta mejora en la situación de seguridad y del progreso en el proceso de paz. De forma directa, al detenerse la violencia que sobre ella se ejercía, y de forma indirecta, pues está permitiendo el retorno a la vida normal, incluyendo el relanzamiento de una cierta actividad económica básica, y el trabajo de la cooperación internacional. V.H.M. 16 Revista Española de Defensa Septiembre 2016
REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA 331
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