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REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA 326

misiones internacionales Revista Española de Defensa 9 CENTRO DE ENTRENAMIENTO El grueso del contingente español, que está formado por aproximádamente 300 efectivos, se encuentra en el BPC (Build Partnership Capacity) de Besmayah, en el que también trabajan 52 instructores británicos, 30 estadounidenses y 30 portugueses. Las instalaciones de la base, denominada Gran Capitán, fueron acondicionadas en los primeros meses por una unidad del Mando de Ingenieros desplazada al país junto a los efectivos de la Legión que abrieron la misión. En el año transcurrido, los militares españoles han culminado el adiestramiento de las Brigadas iraquíes 92 y 72, con un millar de soldados cada una, tarea que les ha llevado doce semanas, respectivamente. Además, han entrenado a tres batallones, en periodos de seis semanas cada uno, con un total de 850 efectivos. Por otro lado, se han completado cursos de formación más específica centrados en el uso de morteros, inteligencia y desactivación de artefactos explosivos improvisados (IED), y se ha dado formación a los instructores de la nueva Escuela de Ingenieros, levantada a menos de tres kilómetros. El contingente también se compone de sendas unidades de base y de apoyo logístico y una unidad de EMAD protección, más conocida como «los ángeles de la guarda», responsables de proporcionar la seguridad, tanto en la base como en las actividades de instrucción fuera de ella. El adiestramiento de la Brigada 72 se inició a finales del pasado octubre bajo la dirección de los instructores de la BRIPAC. Uno de sus primeros objetivos fue que los iraquíes adquirieran destreza con los nuevos materiales de procedencia americana, sobre todo armamento y vehículos Los paracaidistas fueron relevados a mediados de diciembre por el actual contingente procedente de la Brigada Extremadura XI, que asumió desde ese momento la responsabilidad de finalizar la formación de los soldados iraquíes, culminada con su graduación a finales de enero. Han sido doce semanas de instrucción y adiestramiento en las que han recibido una completa formación que les ayudará a sobrevivir en el campo de batalla, todo ello mediante un adiestramiento centrado a nivel de compañía de Infantería. «Nuestra intención era que el batallón saliera operativamente mejor preparado y lo más cohesionado posible», señala el coronel Gutiérrez del Olmo. Además de realizar numerosos ejercicios de ral para los iraquíes, que ya se ven capaces de expulsar a los yihadistas de su territorio y recuperar la normalidad en su país. —Los combates se están librando a pocos kilómetros de la base española ¿Qué medidas de seguridad se toman? —Dentro de la inestabilidad y la situación de conflicto que vive Irak, la zona donde se encuentra la base Gran Capitán es relativamente segura. Estamos a unos 40 kilómetros al este de la capital y es una zona de mayoría chií. Nuestro destacamento está dentro de una base iraquí, lo que nos proporciona un plus de seguridad, y tenemos nuestra propia unidad de protección, que nos acompaña dentro y fuera de la base, en todas las actividades que llevamos a cabo. En cualquier caso, la seguridad al 100 por 100 no existe y menos en un país como Irak, pero asumimos el riesgo como militares que somos, con la tranquilidad que nos da nuestra preparación y los medios con los que contamos. —Concluida la instrucción de la brigada 72 ¿Cuál es el programa previsto para las próximas semanas? —La próxima unidad que va a adiestrarse en Besmayah es la Brigada 35. Es una unidad acorazada y su programa de instrucción será de trece semanas, similar en tiempo al realizado por la Brigada 72. Cuando se incorpore veremos cuál es su nivel de instrucción inicial. A partir de ahí, empezaremos a trabajar con ellos en los aspectos que nos marque la coalición, en las carencias que nosotros detectemos y en los aspectos de instrucción que el jefe de la Brigada nos solicite. —¿Servirá de referencia la experiencia que han tenido con la anterior unidad? —Habrá aspectos que podamos introducir por la experiencia de estos dos meses, pero los programas de instrucción deberán ser diferentes por el carácter acorazado y mecanizado de la Brigada 35. Para la coalición es un reto importante y uno de los motivos de que haya venido a adiestrarse a nuestro BPC es, precisamente, porque somos la única unidad mecanizada desplegada ahora mismo en Irak y tenemos experiencia en este tipo de unidades. —¿Los mandos de la coalición valoran el trabajo del BPC español? —El teniente general McFarland y el general Clarke nos han transmitido personalmente su satisfacción por lo realizado con la Brigada 72. También lo han hecho los jefes de las unidades iraquíes. Para nosotros es un estímulo y una responsabilidad, porque, al final, es el prestigio de España y de sus Fuerzas Armadas lo que se consigue. Los instructores ayudan a los iraquíes a familiarizarse con la utilización de todo tipo de armamento y equipos que les suministra el Ejército estadounidense. Marzo 2016


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