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REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA 333

ñías privadas más interesadas en el valor económico de los pecios que en su historia, como la Odyssey Marine Exploration con el expolio de la fragata Mercedes. «Insensibles a la hora de remover los restos de un naufragio con la codiciosa intención de extraer su valiosa carga, sin tener en consideración que estaban profanando la tumba de unos desdichados marinos, ni respetando la inmunidad soberana que el derecho internacional otorga a los buques de Estado». Es precisamente en este punto, en la titularidad de los barcos naufragados, donde la Armada —en representación del Ministerio de Defensa— toma un rol activo como garante de ese patrimonio, junto con los departamentos de Cultura, Interior, Asuntos Exteriores, Fomento y Medio Ambiente, las comunidades autónomas y otras entidades oficiales. POR LA MEMORIA COMÚN Y LA LEY «El papel de la Armada se justifica por sí solo, a través de los vínculos que tiene con sus buques y dotaciones, así como el respeto y reconocimiento de su historia», señaló el director del OHCN, vicealmirante Fernando Zumalacárregui, al inicio de su ponencia La Armada y el Patrimonio Arqueológico Subacuático, ofrecida en el ya citado foro de pensamiento naval celebrado en Madrid. Pero, también, las leyes señalan a la Armada como uno de los valedores de ese legado. La primera norma citada en este sentido por Zumalacárregui fue la Ley Orgánica de Defensa Nacional 5/2005, que asigna a las Fuerzas Armadas la vigilancia de los espacios marítimos además de las actividades destinadas a proteger, allá donde sea necesario, los intereses españoles, entre los que se encuentra la protección del PAS. El director del OHCN recordó también que «España firmó en el año 2005 la Convención de París de 2001 sobre la protección del Patrimonio Subacuático, en la que uno de sus principios es que los Estados deben velar por que se respeten debidamente los restos humanos» y destacó el Plan Nacional de Protección del PAS (2007), marco de referencia para aunar esfuerzos entre las administraciones competentes en estas lides. Tal propuesta, concretada en su Libro Verde, recoge de forma expresa «la competencia de la Armada en la concesión de h NAVÍO gf NAUFRAGIOS DOCUMENTADOS Se han identificado 50 tipos de barcos siniestrados en los cinco continentes* 182 h LAÚD 141 h VAPOR 140 101 España NORTE DE ÁFRICA AMÉRICA DEL NORTE, CENTRAL Y EL CARIBE 3,4% Cuba AMÉRICA DEL SUR (*)Modelos más frecuentes «La Flota de Indias —dijo— no sólo transporta productos, como palo campeche, 60 Revista Española de Defensa Noviembre 2016 h NAO h FRAGATA 98 59,3% 5,4% EUROPA EXTREMO ORIENTE 1,78% Y AUSTRALIA Filipinas 50,7% 4,25% 26,7% 6,8% HUNDIMIENTOS POR SIGLOS XIII–XV XVI XVII XVIII XIX XX 16 238 147 390 239 307 Fuentes: Museo Naval y Museo Marítimo de Barcelona. Rafael Navarro / Revista Española de Defensa Naufragiospáginas.indd 59 28/10/16 10:48 lana de vicuña, cochinilla, especies y otros, sino también la tan codiciada plata». Por ello, esas expediciones —que siempre fueron empresas de Estado— se reforzaron con las nao capitana y almiranta, buques bien armados y que cargaban caudales particulares y de la corona. CONTRABANDO Y PATENTES DE CORSO Por último, Aragón citó el rápido crecimiento del Nuevo Mundo en el XVII y el correspondiente incremento de un consumo que no pudo satisfacer en su totalidad el monopolio de la Casa de la Contratación. A falta o carestía de mercancías legales en las riberas centroamericanas, prosperó el contrabando y, frente a él, los armadores con «patente de corso». Licencias de los gobiernos para registrar embarcaciones sospechosas de comercio ilícito. Así, contrabandistas y corsarios pasaron a ser dos actores más de este escenario favorable a la pérdida de naves que, además, era santuario de piratas. Todo ello, «convirtió el lecho del Caribe en lugar de descanso de numerosos naufragios y fuente de inspiración novelesca », concluyó Aragón que, a continuación, enlazó con nuestros días y la actual búsqueda de hundimientos gracias a los avances tecnológicos. El colaborador del OHCN alertó en este sentido de la proliferación de compa


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