EEl Rincón de la Historia R H LA GUERRA CIMBRIA Enaitz Jar García de Andoaín. Sargento. Ejército del Aire LA MARCHA CIMBRIA En el año 120 a.C. tuvo lugar en la península de Jutlandia un fenómeno natural, la llamada «inundación cimbria», que provocó que las aguas del Øresund fuesen ganando paulatinamente terreno mediante violentas tormentas de modo que, para el año 114 a.C., la línea costera se había alterado notablemente, lo que hacía muy difícil la vida de los lugareños. Ante esta situación, los caudillos de las tribus germánicas de Jutlandia optaron por emprender una migración hacia el sur (un tanto desorganizada) en busca de nuevas tierras, la denominada «Marcha Cimbria», y desplazaron en su camino a otras tribus, generalmente de origen céltico, que ante el avance germánico se veían empujadas hacia la frontera de la entonces República romana. Surgió entonces la figura de Boiorix, caudillo de los cimbrios cuyo origen se pierde en la noche de los tiempos. La etimología de su antropónimo significa «rey de los boyos», una tribu germánica asentada en la actual Austria, demarcación cruzada por la Marcha Cimbria en sus primeros momentos, por lo que los historiadores especulan que Boiorix pudo ser el jefe de un grupo de boyos que se unió a la Marcha Cimbria o bien un guerrero cimbrio que recibió tal apodo tras alguna olvidada victoria frente a los boyos. En cualquier caso, aproximadamente a partir del año 113 a.C., Boiorix, junto a Teutobod (caudillo de los teutones), colideraba una amalgama de tribus, pueblos y naciones germánicas y celtas, incluyendo a cimbrios, teutones, ambrones, tigurinos, helvecios y boyos, una marea humana conformada no solo por guerreros sino por la población completa de las diferentes tribus, cuyo número iba creciendo constantemente desde los apenas 30.000 cimbrios de origen a los más de 300.000 improvisados guerreros que tomaron parte por el
EJERCITO DE TIERRA ESPAÑOL 919
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