Las patronas de Artillería e Infantería caracterizan el cuarto trimestre del año. Basándome en la efeméride del 8 de diciembre, quiero ahondar en el ADN paracaidista. El hecho de armas que año tras año rememoramos es un compendio de las cualidades que todo soldado debe atesorar: espíritu de sacrificio, disciplina, valor, determinación. Son las claves que los fundadores de las fuerzas paracaidistas del Ejército de Tierra nos han transmitido a través de nuestro ideario, priorizando la misión sobre cualquier consideración, inhibiéndonos de los factores externos, exhortándonos a luchar y, en definitiva, no admitir más que el triunfo o la muerte. Es el espíritu de la infantería española, inmutable a lo largo del tiempo, del que somos herederos y depositarios. Al igual que aquellos Tercios invencibles en los que “no adorna el vestido el pecho que el pecho adorna al vestido”, debemos resaltar unas cualidades que debemos cultivar día a día: la disponibilidad y el carácter expedicionario. Al igual que los Tercios, la Brigada Paracaidista es esencialmente una fuerza diseñada para su proyección en un breve plazo de tiempo, a una profundidad variable según los objetivos a alcanzar, y con una capacidad de combate limitada que compensa con la voluntad de vencer de sus paracaidistas, su acción decidida en el combate, su flexibilidad y su versatilidad. Conformamos una gran unidad que debe ser creíble en su preparación y organización. Para ello, sus paracaidistas han de desarrollar una gran resistencia física y emocional con la preparación diaria que les permita combatir en condiciones degradadas y austeras. Además, debe adiestrarse en las actividades del combate específicas paracaidistas. Y por último, el equipo del que esté dotada debe ser proyectado del mismo modo que el personal. Debemos estar preparados y dispuestos, y eso solo se logra con la instrucción, el adiestramiento y la forja de una voluntad inquebrantable. Tras esta introducción, solo me queda hacer referencia a nuestra actividad de instrucción y adiestramiento en este cuarto trimestre que sustenta lo dicho. El ejercicio “Swift Response” 17, desarrollado en Alemania e Italia, con participación de la Compañía de Reconocimiento Avanzado y un subgrupo táctico. En él se pone en práctica el concepto de entrada inicial, enmarcado en la 173rd Airborne Brigade y la 82nd Airborne Division de los EE.UU. El ejercicio “Listed Paratrooper”, desarrollado por el Grupo Táctico Paracaidista liderado por la BPAC “Roger de Flor” en León y Ayllón. En él se realizó el lanzamiento del escalón avanzado en HALO-HAHO y el escalón de asalto, con lanzamientos de personal, cargas y mixtos. El ejercicio “Trueno” II/17, desarrollado en el CENAD San Gregorio, en el que participaron todas las unidades de la Brigada. Y el ejercicio “Dragon Ibero” 17, en el que desplegó el puesto de mando principal enmarcado en un ejercicio de división y en el que se llevó a cabo la conducción de una operación, incluyendo salto del PC. El otro hito enmarcado en esta tradición expedicionaria, es el inicio en el mes de noviembre de la ejecución de los planes de adiestramiento operativo para preparar los contingentes que en mayo de 2018 desplegarán en Iraq (A/I VIII) y Mali (EUTM Mali XII). Preparar fuerzas destacadas lejos de España para defender los intereses nacionales es nuestra principal razón de ser y a la que debemos enfocar todo nuestro esfuerzo. Se lo debemos a los que nos precedieron y a aquellos soldados míticos de los Tercios que cincelaron la Europa actual. 3 editorial Vuestro General Alfredo Pérez de Aguado Martínez
Boina negra 292
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