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Boina negra 292

HHIISSTTOORRIIAA PPAARRAACCAAIIDDIISSTTAA DESIDERIO PAREDES, LA BÚSQUEDA CONSTANTE DEL PERFECCIONAMIENTO Oficiales y suboficiales del primer curso paracaidista del ET. El sargento Paredes en el centro de la imagen (fotos: álbum de la familia Paredes) Páter Carrasco su ascenso a sargento, también se dan dos hechos importantes en su vida: por un lado, es destinado al Batallón de Cazadores de Montaña “Galicia” X e incorporado a la compañía de esquiadoresescaladores, puesto al que no se incorpora de manera inmediata por, y este es el otro hecho, encontrarse realizando el Curso de Instructores de Educación Física en la Academia de Toledo. Ambos hechos son importantes pues ambos nos dan pistas del carácter del comandante Paredes: un hombre con capacidad de trabajo, dispuesto a formarse todo lo posible para que el trabajo que tenía que realizar fuera lo más preciso y efectivo posible, como se encargaría de demostrar en años sucesivos. La entrega y la humildad, las características que mejor lo definían En Cazadores de Montaña permanecerá hasta su incorporación a la recién creada I Bandera Paracaidista del Ejército de Tierra. En entrevista concedida a Boina Negra, el comandante Paredes, lejos de palabras grandilocuentes o de gestos épicos y haciendo gala de la enorme humildad que siempre lo caracterizó, explicaba su ingreso en la recién creada fuerza paracaidista como si esto fuera el paso natural en el desarrollo de su vida militar y lo “más natural del mundo”. Integrado ya en la naciente unidad del Ejército de Tierra, enseguida se granjeó el afecto de sus compañeros, haciendo gala del carácter que Hay personas que, sin saber cómo ni por qué, están en el lugar correcto y en el momento justo para que su nombre pasa a formar parte de la lista de aquellos que han de ser recordados bien por sus hazañas o por sus méritos y, a veces, solo por la huella que dejaron en el corazón de aquellos que tuvieron la oportunidad de conocerle. En el caso del comandante Desiderio Paredes Gimón quizás pudiera ser por las tres cosas. Su reciente fallecimiento, tras más de 90 años de bregar en esta vida, nos permite echar la vista atrás y recorrer, junto a la vida del comandante Paredes, la propia historia de la Brigada Paracaidista pues no en vano él estuvo entre los primeros: formó parte del primer grupo de suboficiales destinados a la recién creada I Bandera Paracaidista y estuvo entre los que realizaron el primer lanzamiento del Ejército de Tierra el 23 de febrero de 1954. Pero antes de su llegada a los paracaidistas Desiderio Paredes ya tenía a sus espaldas casi una década de servicio en el Ejército así que, vayamos al principio. Natural Castroverde (Valladolid), Desiderio Paredes ingresa en el ejército en noviembre de 1945, a punto de cumplir los 20 años. Lo hace como voluntario en el Regimiento de Infantería “San Quintín” n.º 32, acantonado por aquella época en Valladolid y hoy disuelto, y en el que dará sus primeros pasos en la carrera militar. Desde su ingreso hasta 1950 irá obteniendo sucesivamente los empleos de cabo, cabo 1.º y sargento. En el mismo periodo en el que obtiene 53


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