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LA ÚLTIMA BATALLA DE LA GUERRA DE LOS 80 AÑOS… 157 precaria, asediados por los locales quienes bloqueaban la posible llegada de alimentos, tuvieron que alimentarse de hierbas silvestres63. Finalmente, en 1663, el gobernador de Filipinas Sabiano Manrique de Lara decidió la evacuación y el desmantelamiento de las fuerzas de las Molucas. Ante la amenaza sobre Manila del corsario chino Koxinga, decidió reagrupar y concentrar las fuerzas dispersas en el sur de Filipinas, en torno a Manila. Se acabaron imponiendo las opiniones que consideraban las Molu-cas como una pesada carga económica y militar para las islas Filipinas. Por encima de la amenaza de la invasión china–que nunca llegó a producirse–el envío anual de soldados, municiones y víveres a Ternate, sumado a la falta de rentabilidad económica del comercio del escaso clavo que se controlaba en las zonas españolas, fueron las grandes razones que explicaban su aban-dono. Junto a los soldados españoles también abandonaron las Molucas toda la población católica de las islas. Los llamados márdicas se establecie-ron cerca de Cavite, fundando la población de Ternate (donde actualmente aun viven los descendientes de esta comunidad conservando su propio idio-ma). Los españoles al abandonar las Molucas derribaron los fuertes para que no pudieran ser utilizados por los enemigos durante lo que se creía una evacuación temporal. Un año después, el gobernador holandés al ver que los españoles no regresaban y temiendo que los fuertes pudieran ser utilizados por los locales para posibles rebeliones, ordenó derribar y echar abajo las torres de las fortificaciones españolas de Ternate64. En 1663, casi seis décadas después de la conquista de las Molucas, terminó el fin de la soberanía española del dominio más meridional del imperio español asiático. Un periodo de soberanía ininterrumpida durante el cual ningún de los fuertes principales fue tomado por los enemigos y únicamente una decisión tomada desde Manila fue capaz de acabar con el dominio español de la zona. Sin embargo, quedó una pequeña guarnición española en la isla de Siao. Esta pequeña isla al norte de Sulawesi cuyo rey y su población católica aun mantenían lealtad a España, albergó un grupo de 25 soldados (13 españoles y 12 pampangos) y 3 religiosos65. Los holandeses temiendo que su influencia pudiera extenderse a territorios bajo su control (como así pasó en el norte de Sulawesi) empujaron al sultán de Ternate a la 63  AGI, FILIPINAS, 58, N.3., “Confirmación de encomienda de Majayjay, etc” de fecha 8 de junio de 1695. Gracias a: RAMERINI, Marco: Le fortezze spagnole nell’isola di Tidore, en www.colonialvoyage.com 64  VALENTIJN, François: op.cit., pág. 490. 65  AA, R Van der: “Het journaal van Padtbrugge´s reis naar Noord-Celebes en de Noordereilan-den (16 Aug.-23 Dec. 1677), Bijdragen tot de tall,land en volkunde van Nederlandsch-Indië, Revista de Historia Militar, 124 (2018), pp. 157-160. ISSN: 0482-5748 nº 14, 1867, pp.105-140.


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