39 superior. Esto se refleja también en la orientación más académica de las revistas militares, varias de las cuales están catalogadas en la base de datos Dialnet (https://dialnet.unirioja. es/): Revista Ejército, Cuadernos de Estrategia, Revista General de Marina, Revista de Historia Militar, etc. En España solo existen dos programas de doctorado: Paz y Seguridad Internacional y Análisis y Estudios en Paz, Seguridad y Defensa, siendo en ambos casos programas desarrollados en colaboración con el Ministerio de Defensa CONCLUSIONES El fin de la rígida separación entre lo civil y lo militar es uno de los signos de los tiempos. En nuestra sociedad del conocimiento es difícil definir con precisión qué es específicamente militar, de manera que la tendencia predominante es poner todo el conocimiento disponible a disposición de quien pueda necesitarlo, sea con finalidades civiles, militares o, lo que resulta más frecuente en nuestros días, mixtas. En Europa, este enfoque se ha impuesto, aunque, según los países, existan modalidades distintas para llevarlo a la práctica. En cualquier caso, las Fuerzas Armadas son una rama muy específica de la Administración del Estado y se enfrentan a condicionantes y retos claramente diferentes de los que afectan a la Administración civil. Concebidas como ultima ratio regis, su actividad diaria se centra en la «preparación», más que en la «producción» (Silvela: 92), y, en última instancia, pueden verse obligadas a hacer uso de una fuerza letal, ocasionando muerte y destrucción (Silvela: 89). Podemos preguntarnos si la investigación de carácter general puede ser suficiente para cubrir las necesidades de innovación de un órgano tan particular como las Fuerzas Armadas o si, por el contrario, se necesitan programas específicamente adaptados a las circunstancias y necesidades militares. No se plantea ya la cuestión de si las Fuerzas Armadas contemporáneas deben transformarse o no en «organizaciones aprendientes». Está claro que sí deben. El problema radica, más bien, en decidir si deben disponer para ello de un sistema específico de investigación o si les bastaría con aprovechar en beneficio propio los resultados obtenidos por otros (universidades y centros no universitarios de investigación). O si, dado que el empleo normal de las Fuerzas Armadas va a estar encuadrado en dispositivos multinacionales, no sería más racional aceptar, como Unamuno, «que inventen ellos» (los americanos, la OTAN, cualquiera que sea el país u organización de referencia en cada momento). Entendemos que la respuesta puede variar según los países, en función de sus diferentes tradiciones, ambiciones geopolíticas y otras circunstancias. Con todo, parece que de lo expuesto en este artículo pueden extraerse algunas reglas generales: • Un país con ciertas ambiciones estratégicas (capacidad de actuación autónoma en su ámbito de interés nacional prioritario y capacidad de influencia sobre la orientación de las alianzas político militares de las que forme parte) debe disponer de su propio sistema de investigación en cuestiones específicamente militares. • Si no existe una fuerte tradición de estudios militares en las universidades civiles, una forma eficaz de organizar la innovación militar es creando centros de investigación dentro de las Fuerzas Armadas, sometidos a los mismos criterios de rigor que los centros de investigación civiles (universitarios). • El doctorado en Ciencias de la Defensa (o de la Seguridad)5 es una buena forma de iniciar en la investigación específica sobre estos temas a militares y civiles que puedan estar interesados en ellos. BIBLIOGRAFÍA -- Burk, J. y Moskos, C. « The postmodern military». En Burk, J. (ed.). The Adaptive Military: Armed Forces in a Turbulent World. Transaction Publishers, New Brunswick; 1994, pp. 163182. -- Burr, R. M. Leading change: The military as a learning organization. Marine Corps Command and Staff Collefe, Quantico; 1998. -- Marsia, J. La clef d’une défense européenne, celle des Etats-Unis d’Europe ! : De l’École royale militaire de Belgique à une université européenne de défense. Edición Kindle. Academic & Scientific Publishers, Bruselas; 2016. -- Silvela Díaz-Criado, E. «La fuerza letal: esencia de la profesión militar». Revista Ejército, n.º 870 (octubre de 2013), pp. 86-93. NOTAS 1. Información recibida del coronel polaco Dr. Józef Kozłowski. 2. Información recibida del coronel belga Dr. Jean Marsia (antiguo director de Enseñanza Militar de la Escuela Real Militar) y del Prof. Fernando Ruiz (Escuela Real Militar). 3. Información recibida del Prof. David Getz (King’s College, Londres), Prof. Philip Davies (Brunel University, Londres) y del Dr. Kristian Gustafson (Brunel University). 4. En la base de datos Teseo de tesis doctorales (https://www.educacion. gob.es/teseo/) figuran menos de 30. Evidentemente, este número puede aumentar o descender ligeramente dependiendo de qué se considere «de interés actual para la defensa». 5. Códigos 1031 y 1032 del ISCED Fields of Education and Training 2013 (UNESCO).■
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