LUIS NEGRO MARCO del natalicio de su hijo, ambos eran ya mayores. Las convicciones religiosas de su madre era de tan fuertes que, en el momento de dar a luz, se rasladó al establo de la casa para rememorar de esta manera el nacimiento de Jesús, quizá porque, dada su avanzada edad en el momento de la gestación, consideró el nacimiento del que fue su único hijo un milagro de Dios. En cuanto al padre, este había sido soldado de carrera y luchado bajo la bandera del emperador Carlos V, participando en el saqueo de Roma (protagonizado por las tropas del Sacro Imperio Románico Germánico de Carlos V), que tuvo lugar el 6 de mayo de 1527. Primeros intentos de ingreso en la Armada Habiendo quedado huérfano de madre a los trece años, Camilo fue enviado por su padre a la escuela, donde apenas aprendió a leer y escribir, dada su rebeldía y poco gusto por los estudios. Por el contrario, ya de adolescente, se mostraba muy diestro con los naipes y los dados, siendo su pasatiempo más erudito la recitación de pasajes de églogas, aunque no por afán de estudio, sino por mera diversión. Fue así como, una vez cumplidos los veinte años, su padre decidió llevarlo consigo a la milicia. Así, en 1570, padre e hijo llegaron a la ciudad de Ancona (3), donde iban a embarcarse para servir en la armada veneciana contra los turcos. Sin embargo, los dos enfermaron gravemente, y hallándose sin fuerzas para los trabajos de la guerra, resolvieron dar la vuelta y regresar a su Bucchianico natal. En su retirada, una vez hubieron llegado a San Lupidio, cerca Grabado de 1588 que representa la fachada del Hospital de Santiago de los Incurables, en Roma (4). de Loreto, se le agravó el mal a Juan de Lelis, que murió a los pocos días. Quedó enterrado en la iglesia de San Francisco de aquella ciudad. (3) En julio de 1570 se había decidido armar 12 galeras del papa Pío V en Ancona, para de allí pasar a Corfú y unirse en esta isla con la armada veneciana para la defensa de Chipre. Al frente de las galeras papales se puso como capitán general a Marco Antonio Colonna. (4) Camilo de Lelis ingresó en él una vez fallecido su padre en 1570, para intentar sanar de una llaga en su pie derecho que, sin embargo, nunca pudo curar. 72 REVISTA DE HISTORIA NAVAL Núm. 143
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