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truido en astilleros brasileños. La Estrategia Nacional de Defensa (END), promulgada en 2008, establecía que Brasil debería tener una «fuerza naval de envergadura», que incluía submarinos de propulsión nuclear. Ese mismo año se firmó el acuerdo de transferencia de tecnología entre Francia y Brasil. Los cuatro submarinos convencionales clase Scorpene deberán entrar en servicio antes de que finalice 2022. Después del Riachuelo (S-40) en 2020, vendrá el Humaitá (S-41) ese mismo año, el Tonelero (S-42) en 2021 y el Angostura (S-43) en 2022. Por último, el primero de propulsión nuclear será bautizado como Álvaro Alberto en homenaje al almirante brasileño pionero en la utilización de la energía nuclear en Brasil, y se espera que pueda ser entregado a partir de 2023. Colombia Nuevos helicópteros con capacidad ASW.—Durante la ceremonia de entrega de dos nuevos helicópteros Airbus AS365 Dauphin, los ARC 251 y ARC 252, la Marina colombiana ha confirmado su intención de dotar a estas aeronaves de capacidades antibuque y antisubmarinas. El portavoz naval explicó que estos helicópteros permitirán complementar y mejorar las operaciones de vigilancia y control de los espacios marítimos y en el futuro contribuirán a la detección y transferencia de información más allá del horizonte (OTH). Los ARC 251 y ARC 252 comenzarán sin dilación su despliegue operacional en el Grupo Aeronaval del Caribe (GANCA) una vez superadas las pruebas de toma y despegue en un patrullero OPV-80 navegando fuera de la vista de costa. Ambos helicópteros, además de las misiones descritas, podrán realizar cometidos SAR y apoyar a las labores que realicen las embarcaciones hidrográficas. Estados Unidos Construcción de dos portaviones nucleares clase Ford.—Los astilleros estadounidenses de Huntington Ingalls Industries (HII) anunciaron la firma del contrato, por un importe de 14.900 millones de dólares, para el diseño y construcción de dos portaviones de propulsión nuclear, USS Enterprise (CVN-80) y CVN (81), de la clase USS Gerald R. Ford (CVN-79). Este contrato supone una inversión equivalente al 150 por 100 de todo el presupuesto de Defensa español para 2019. La construcción se enmarca dentro del programa naval para conseguir 355 buques operativos en 2030, de ellos 12 portaviones, y la decisión de encargar dos en lugar de uno supone un ahorro al contribuyente norteamericano de unos 4.000 millones de dólares, al abaratar costos en los astilleros. En los años 80 se hizo algo similar con los dos portaviones de la clase Nimitz, los USS Abraham Lincoln (CVN-72) y USS George Washington (CVN-73). El USS Enterprise (CVN-80) está previsto entre en servicio en 2027, y tres años más tarde el CVN-81, todavía sin un nombre asignado. Ambos reemplazarán a los USS Dwight D. Eisenhower (CVN-69) y USS Carl Vinson (CVN-70), respectivamente. La adjudicación de este contrato supone una carga de trabajo para unas 2.000 empresas norteamericanas en 46 estados. Actualmente se encuentra en las gradas de estos mismos astilleros el USS John F. Kennedy (CVN-79), segundo de la serie y cuya entrega está prevista para 2024. Adquisición de 19 aviones ASW P-8A Poseidon.—La Marina estadounidense ha otorgado a la empresa Boeing un contrato para construir 19 aviones P-8A Poseidon, además de los 89 ya adquiridos y entregados. Este contrato por un importe de 2.400 millones de dólares por avión de patrulla marítima y antisubmarina. Basado esencialmente en el comercial Boeing 737-800ERX, incluye cinco unidades para Noruega y cuatro para el Reino Unido. Este último recibirá su primer avión este mismo año y Noruega en 2021. Además de estas dos naciones, tanto la India como Australia y Nueva Zelanda han adquirido ocho, doce y cuatro unidades respectivamente de este sustituto del P-3C Orion, con un precio unitario próximo a los 130 millones de dólares. NOTICIARIO 358 Marzo


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