TeMaS GeneRaLeS
Crucero Canarias.
Con aquellas y otras disposiciones de menor entidad del decreto en vías de
implantación, el 14 de abril de 1931 llega la República. La importante Ley del
10 de julio siguiente trajo consigo grandes innovaciones, que afectaban, entre
otros, a los maquinistas. Quedaban encuadrados en nuevas categorías designadas
con el «apellido» de la especialidad, como tradicionalmente se hacía en
otras corporaciones militares: general maquinista, coronel maquinista, etc.,
hasta llegar a teniente maquinista. No menos innovadora fue la creación de la
Escuela Naval Única, en la que se ingresaba para el Cuerpo General y el de
Maquinistas por «libre oposición común», cursando los estudios con el mayor
número de clases comunes posibles. Esto suponía lograr un objetivo bien
sopesado: separar la parte correspondiente a los subalternos (2.ª Sección), con
lo que el Cuerpo de Maquinistas quedaría constituido solo por oficiales. Lo
que no contemplaba la Ley era una posible participación de los «nuevos»
maquinistas en los órganos directores de la Armada o su acceso a la función
de mando.
Muy poco de lo previsto llegó a ver la luz, y el Cuerpo continuó su andadura
con el mismo centro de enseñanza, antes llamado Academia y ahora
Escuela de Maquinistas (17), donde, por una u otra causa, durante los tres
años anteriores al comienzo de la Guerra Civil se ralentizó la actividad, reci-
(17) En enero de 1932, la Alcaldía de Ferrol abogó para que no se llevasen a los maquinistas
a la Escuela Naval de San Fernando, «por no reportar beneficio alguno a los intereses generales
y perjudicar grandemente a los de dicha ciudad (Ferrol)». Permanecieron en su Escuela
del Cantón de Molins.
862 Junio