59 Como vemos por las fechas, estamos a punto de cumplir cincuenta años y todas ellas se encuentran, con más o menos reformas, en perfecto uso. En aquel tiempo la dependencia del centro era directa del capitán general y para la dirección y administración del mismo se nombraba una Junta directiva que contaba con personal destinado en Capitanía General y era presidida por un general de división en situación de reserva. Además se contrató desde el principio un importante número de personal civil para prestar sus servicios en apoyo a la Junta en todas las cuestiones administrativas y en las numerosas y exigentes tareas de mantenimiento. Fue en 1972 cuando, por parte del Estado Mayor del Ejército, se elaboraron los primeros estatutos que fueron modificados y aprobados en diciembre de 1982. Este cambio trajo consigo otro no menos importante, como fue el de la sustitución de la denominación de club militar por la de centro deportivo militar La Dehesa. Durante estas primeras épocas el club/centro era autosuficiente, es decir, gestionaba por sí mismo el dinero ingresado por sus usuarios, lo que permitió, con cierta facilidad, que las sucesivas Juntas fueran aumentando el número y la calidad de las instalaciones, entre las que fueron significativas, por su volumen e importancia, la construcción a principios de los años ochenta del complejo hípico (uno de los más grandes y mejores de Europa en su momento) y la del campo de golf, proyecto desarrollado durante la segunda mitad de la década de los años noventa y que, aunque incompleto, con diez hoyos funciona hoy a pleno rendimiento. En el año 2003 se publicó una orden de Defensa que establecía el régimen jurídico y de funcionamiento de los centros deportivos y socioculturales, lo que provocó que el centro pasara a depender orgánicamente de la DIAPER del Mando de Apoyo al Personal (MAPER) y que modificara su denominación por la que actualmente ostenta, Centro deportivo sociocultural militar La Dehesa. LA DEHESA HOY EN DÍA En la actualidad el centro cuenta en plantilla con puestos de trabajo de personal militar destinado en la dirección, la administración y la gestión del mismo, así como con personal civil funcionario y no funcionario del Ministerio de Defensa. Además, fuera de plantilla, existen vocales delegados que desinteresadamente colaboran en el desarrollo de las diferentes actividades genéricas del centro y representan una herramienta realmente imprescindible en auxilio a la Dirección. Como resulta lógico en un centro de estas características, con una permanente vocación de servicio y que busca constantemente la excelencia, nuestras instalaciones y actividades se han visto incrementadas y han ganado en calidad. Veámoslas, ahora sí, con un cierto detalle.
Revista_Ejercito_939_Extra_1
To see the actual publication please follow the link above