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ICONOGRAFÍA DE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL. INFORMACIÓN... 159 A pesar de que el ser humano intenta olvidar relativamente pronto todo lo que puede significar dolor y miseria, no se puede evitar ni ocultar la realidad de la crudeza de una guerra. La censura latente en el conflicto en ambos bandos si lo intentó quedando constancia, sin embargo, de imágenes de gran dureza y sufrimiento que pueden dañar a las cualidades morales del ser humano. Las fotografías presentes en Guerra a la Guerra12, foto-libro de propósito pacifista, muestran los horrores y miserias de este conflicto de la forma más angustiosa y descarnada posible, trincheras repletas de cadáveres, soldados esperando a morir bajo los efluvios de los gases, mujeres violadas, niños armenios en paupérrimas condiciones, o las fotografías que presenta El Rostro de la Guerra13con las terribles imágenes de rostros mutilados y desfigurados. “...Una vez acostumbrada al horror, la mirada moderna siente la necesidad de ver aún más sin sufrir por ello, de como es posible convivir con las imágenes fotográficas del sufrimiento sin por ello contribuir a cultivar la conciencia moral o la capacidad compasiva, pues a la postre un exceso de imágenes crueles anestesia y adormece más que sensibiliza o indigna”.14 Soldado austriaco muerto en el campo de batalla. Gelatina sobre papel baritado, 1914-1918, AGMM F.00635 12 FRIEDRICH, Ernst: ¡Guerra a la Guerra!, 1924. 13 JÜNGER, Ernst: Los dos volúmenes de El Rostro de la Guerra, 1930 y 1931. 14 OCAÑA, Enrique: “Fotografía, Guerra y dolor”, en Guerra, Técnica y Fotografía de Ernst Jünger, 2002, pp. 59-60. Revista de Historia Militar, I extraordinario de 2019, pp. 159-196. ISSN: 0482-5748


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