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por hélice y elevados otra veintena de aviones sin motor de todas las épocas. Destacan la Fieseler Storch con su inmensa envergadura de ala y su estrecho fuselaje, que te permitía aterrizar y despegar en una caja de cerillas. Está en perfectas condiciones de vuelo tras finalizarse su restauración en 2003 con algunas piezas de otros aparatos. De hecho, se pueden abrir las puertas del hangar y salir a volar. También proveniente de la Primera Guerra Mundial, encontramos un Fokker D-VII con su peculiar camuflaje y en el que todo en él es original. Una avioneta Junker-1 con su inconfundible corte de chapa, y una avioneta Yakolev -50 acrobática de la antigua RDA, con los característicos colores de los aviones del país, merecen ser señalados La siguiente instancia atraviesa la antigua torre de control y sala meteorológica, donde se puede ver la historia del aeródromo desde sus orígenes de 1914, hasta sus últimos días de uso permanente como base de entrenamiento de pilotos helicópteros norteamericanos en los setenta, que eran instruidos aquí antes de ser enviados a Vietnam. Tras un acuerdo gubernamental de última Primer plano del morro de CASA. 200 ejemplares se construyeron en Tablada y apenas quedan media docena repartidos por varios museos hora, comenzó su impecable restauración y una parte de la historia aeronáutica germana permanece así viva. Magnífica es la sala de restauración de aeronaves, visible desde un pasillo superior, donde gracias a un aguerrido y entusiasta equipo de voluntarios deja inmaculados los aparatos, atajando la corrosión que suelen acumular todos, el expolio de equipos y la propia restauración. Uno de los últimos trabajos finalizado es precisamente el de nuestro CASA 2.111b, que diseñado como avión multipropósito, evolucionó a bombardero, construido bajo licencia alemana del bombardero Heinkel 111 H-16 en Sevilla. Su costo por unidad ascendía 900 000 pesetas de la época. Como recuerdo del proceso, se han depositado en unas vitrinas unos ejemplos de piezas y largueros originales completamente oxidados del avión antes de comenzar su restauración. Este, tras participar en el rodaje del film «la Batalla de Inglaterra» durante dos años en distintos escenarios, fue comprado a la productora por la institución. También tiene taller de pintura y funciona a modo de una escuela politécnica. Actualmente se abordan tres proyectos, entre los que destaca un inmenso avión helicóptero, precursor del modelo Osprey, hoy en servicio en distintos cuerpos norteamericanos. Finalmente, llegamos al inmenso hangar donde se encuentran expuestas las tres joyas por lo que lo hacen único: un Me-109 que hizo la guerra en España a los mandos de los pilotos de la Legión La cola del CASA impresiona por su tamaño REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Septiembre 2019 705


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