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El IXPE será lanzado con sus elementos extensibles completamente plegados dentro del limitado volumen del carenado de su cohete Pegasus. Una vez en órbita, desplegará su pértiga con los telescopios, alcanzando una longitud total de 5,2 metros y 1,1 metros de diámetro. Asimismo, abrirá sus paneles solares, que adoptarán una envergadura de 2,7 metros. POLARIMETRÍA Los astrofísicos pueden extraer información muy valiosa de la polarización de los rayos-X. Dado que este tipo de radiación se crea habitualmente en entornos de muy alta temperatura, se pueden estudiar los efectos cuánticos y relativistas de tales entornos, así como las propiedades de los objetos que los generan. Más concretamente, cuerpos como los agujeros negros o los púlsares son muy difíciles de observar directamente, de modo que el estudio de la polarización de los rayos X emitidos desde su entorno nos proporciona pistas indirectas sobre ellos. Calientan el gas que los rodea, y este emite rayos-X polarizados, es decir, vibrando en una dirección en particular. Los astrofísicos pueden utilizar dicha información para inferir las características del gas, e indirectamente de los cuerpos que lo han calentado. Hasta la fecha, las misiones espaciales se limitaban a tomar imágenes y espectros de las fuentes de rayos-X conocidas. Con el IXPE se ampliará el tipo de información y con ello se abarcarán aspectos astrofísicos distintos que pueden aportar resultados no disponibles de otra forma. Por ejemplo, podrían obtenerse nuevos datos sobre la geometría y la intensidad del campo magnético de los magnetares (un tipo de estrella muy densa con un campo magnético extremadamente potente), información sobre el agujero negro que se halla en el núcleo de nuestra galaxia, etc. Esta clase de objetos es tan extrema que es necesario observarlos desde el mayor número de puntos de vista para que puedan ser caracterizados correctamente. El IXPE será orientado constantemente hacia sus objetivos, permitiendo que sus tres telescopios los observen de forma simultánea e independiente. Su longitud focal de 4 metros se consigue gracias al citado mástil desplegable. Además, se halla presente un escudo, también desplegable, que se encargará de evitar que incidan en los detectores rayos-X que no sigan el eje predeterminado (que no hayan pasado por los telescopios), lo cual podría enmascarar los resultados o proporcionar datos no válidos. El centro de operaciones de la misión estará localizado en el CU/LASP (University of Colorado/Laboratory for Atmospheric and Space Physics), donde los controladores gestionarán el día a día del observatorio. La señal del vehículo, en banda S, pasará por Malindi, que la enviará al centro. De la misma manera, las órdenes con la lista de objetivos, por ejemplo, se elaborará en Estados Unidos y se enviará al vehículo desde Malindi u otras estaciones disponibles. Tras el lanzamiento, el IXPE será sometido a una primera fase, con una duración de unos 30 días, durante la cual deberá calibrar su instrumental. Una vez desplegado el mástil con los telescopios, pueden producirse desalineaciones que este periodo de calibración resolverá. Asimismo, durante la misión, una cámara llamada VisCam y una serie de LED lumínicos estratégicamente situados servirán para El IXPE trabajará en la banda de los rayos-X. (Imagen: NASA/MSFC) REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Octubre 2019 781


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