LOS ESGUÍZAROS EN LOS CONFLICTOS BÉLICOS DE LA... 161 supuso para Juan Bautista Cassani una considerable actividad diplomática al tener que notificar al consejo las cuestiones que se debatían en las dietas, aunque solo tenemos constancia documental de lo sucedido entre 1689 y 1691. El despliegue diplomático dio pie a que se extendieran rápidamente rumores de todo tipo, uno de ellos fue la revocación de los Cantones, a instancias de Francia, de lo ajustado en la dieta celebrada en noviembre de 1688, que hacía referencia a la defensa de Constanza y de las «Ciudades Silvestres » ‒suponemos se refiere a pequeñas localidades vecinas y asociadas a los cantones‒. Juan Bautista Cassani tuvo que desmentirlo a las autoridades españolas y asegurarles que las noticias que él tenía de sus superiores lo contradecían. Además, insistió que el congreso no había concluido y en él se estaba debatiendo una cuestión relacionada con un pequeño territorio perteneciente a la jurisdicción del emperador que los esguízaros anhelaban para sí, ya que su defensa correría a su costa. El duque de Lorena, al que le afectaba de manera directa, aprobaba tal disposición, pero esperaban todavía la respuesta de Viena. No obstante, el embajador francés, Amelot de La Houssaye, intentaba embarazar todo lo que fuera en contra de su rey, por este motivo pretendía que el barón de la Torre, representante de San Gallo e inclinado a la facción de la Monarquía Hispánica, no asistiese a la dieta, pero todos sus intentos fracasaron debido a que las amistades del diplomático español consiguieron que su presencia fuera admitida36. La situación bélica suponía para los helvéticos suculentos beneficios, pero tenían que moverse con habilidad para no contravenir los acuerdos establecidos con anterioridad. El coronel de Beroldinghen avisó a Juan Bautista Cassani para que informara a las autoridades españolas que convenía negociar las solicitudes de regimientos atendiendo a la confesionalidad religiosa de las naciones demandantes, pues las experiencias pasadas así lo exigían. España y el Emperador ajustarían con los Cantones Católicos, mientras que Inglaterra y Holanda lo harían con los Cantones Protestantes. Esto no impidió que se conocieran las peticiones formuladas por cada uno, de hecho, Juan Bautista Cassani estuvo puntualmente informado de ellas, bien fuera por el coronel o por el embajador español destacado en los Cantones, con los que mantenía una puntual correspondencia epistolar37. Por ello sabemos que el embajador del rey Guillermo III de Inglaterra pretendió contratar en el Cantón de Zurigo dos regimientos de cuatro mil hombres que lucharían contra Francia en el frente milanés. Los acuerdos no fueron fructíferos a pesar de los ofrecimientos del diplomático inglés, quien elaboró un documento 36 Consulta del Consejo de Estado, AGS, Estado, legajo 3410, exp. 54. 37 Negocios de Estado entre varias Coronas, BRAHM, sig. 9/3625, memorial dirigido a Alonso Revista de Historia Militar, 126 (2019), pp. 161-174. ISSN: 0482-5748 Carnero en enero de 1690.
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