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178 GUILLERMO CALLEJA LEAL Infantería de Marina y 6.000 reclutas voluntarios; pero el día 21 Polavieja recibió un dictamen del Tribunal Médico de Manila y solicitó ser trasladado con urgencia a la Península. Finalmente, el día 15 de abril de 1897, el general Camilo García de Polavieja embarcó y emprendió su viaje de regreso hacia Barcelona, donde fue recibido por una muchedumbre que le aclamó como un héroe y sus partidarios le dieron el título o apodo de “General Cristiano”. LA ÚLTIMA REORGANIZACIÓN DEL EJÉRCITO Pero mientras Polavieja esperaba en Manila a su relevo en el mando de Filipinas, decidió hacer una profunda reorganización de la División Lachambre y ordenó la reanudación de las operaciones militares. Con la provincia de Cavite ya pacificada, naturalmente en apariencia, decidió conceder un indulto general a todos cuantos se rindieran a las autoridades, entregaran sus armas y regresaran a sus poblados. El 12 de abril de 1897, tres días antes de la partida de Polavieja, el general Lachambre dictó la Orden General de 12 de abril de 1897, para informar sobre la disolución de su División en unidades distribuidas entre multitud de pequeñas poblaciones de la provincia de Cavite y del centro de la provincia de Luzón, como la población de Baler, que después alcanzará tan merecido renombre. Se trató de la última reorganización de las tropas de operaciones del Ejército español en Filipinas, consistente en la creación de Brigadas independientes a las que se asignaron: 4 Batallones de Infantería, una Batería de Artillería, 2 Secciones de Ingenieros con un pequeño parque y tropas de la Administración Militar. A cada una de las Brigadas se le asignó una jurisdicción territorial con la misión principal de pacificar su demarcación respectiva con columnas en continuo movimiento de forma que no hubiera más partidas de insurrectos y restaurar el orden público. Además, se les dio otros cometidos: favorecer el que los indígenas rebeldes abandonen la lucha armada, sanear pueblos y caminos, enterrar los cadáveres y quemar los animales muertos que se hallen al descubierto por el campo. El territorio de Cavite se compartimentó en cuatro sectores que quedaron asignados a otras tantas brigadas. Sus cabeceras se ubicaron en Taál, Silang, San Francisco de Malabón e Imus; y a cada una se le asignó una batería, una sección de Ingenieros, otra de transportes y un hospital. Los Revista de Historia Militar, II extraordinario de 2019, pp. 178-206. ISSN: 0482-5748


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