Labores de desinfección exterior con un cañón nebulizador instalado sobre un camión de la UME.
con iones de plata. Junto al sanosil son
los dos compuestos químicos utilizados
en las descontaminaciones de nivel 2.
«Nos permiten reducir al mínimo la pervivencia
del virus, que en el aire oscila
entre las dos o tres horas», dice el sargento
primero Polo. «Cuando entramos
con peróxido o sanosil lo hacemos con la
máscara de Defensa NBQ», comenta el
suboficial, «para evitar graves problemas
de respiración e irritaciones».
La desinfección total de la residencia
ha durado dos horas. Frente a la entrada,
al otro lado de la calle, el equipo del GIETMA
procede a la descontaminación de
sus equipos. Lo hacen en un espacio acotado
con una cinta de seguridad tensada
entre los bolardos y el vehículo militar. Los
elementos desechables de la operación,
como el EPI, los guantes o el papel de
secado, se depositan en un bidón de residuos
que el soldado Vaquerizo pulveriza
por dentro y por fuera. Un ciudadano
que pasa con su coche los saluda con el
pulgar hacia arriba: «¡Viva España!, ¡Viva
el Ejército!», exclama. «Estamos acostumbrados,
la gente nos aprecia», se congratula
el cabo Núñez. Cumplida la misión y
después de comprobar que no hay aviso
de una nueva intervención, el equipo se
repliega a la base aérea de Torrejón, sede
del Cuartel General de la UME.
Días antes de la declaración del estado
de alarma, y a la vista de lo que ocurría
en otros países, la unidad ya comenzó a
prepararse ante una posible extensión
del coronavirus en España. «Nos organizamos
formando a nuestros compañeros
de los batallones de la UME para que cogieran
músculo biológico y pudieran ayudarnos
en la limpieza de infraestructuras»,
apunta el jefe del GIETMA. Debido a la
dimensión de la pandemia, ese adiestramiento
se extendió más tarde a las unidades
de Defensa NBQ y veterinarias de las
Fuerzas Armadas.
LIMPIEZA EXTERIOR
«Lo nuestro es la nebulización pesada;
trabajamos en exteriores», indica el brigada
Félix Rodríguez Lozano, jefe de una de
esas unidades de desinfección de la UME
creadas ad hoc en apoyo del GIETMA en
los cinco batallones de León, Madrid, Sevilla,
Valencia y Zaragoza. El equipo que
dirige el brigada Lozano se ha constituido
sobre la base del pelotón de transporte
del primer batallón, con base en Torrejón
de Ardoz. En una sola jornada de trabajo
pueden dispersar en el aire hasta 8.000
litros de hipoclorito sódico mediante los
cañones que portan sus tres camiones y
otros 1.000 litros desde un todoterreno,
Se han
desinfectado
más de 5.000
residencias de
ancianos, entre
otras instalaciones
20 Revista Española de Defensa Mayo 2020