Presa-García M.E., et al.
INTRODUCCIÓN
La Organización Mundial de la Salud elevó el pasado 11 de
marzo de 2020 la situación de emergencia de salud pública oca-sionada
por el SARS-CoV-2 a pandemia internacional y el 14
de marzo de 2020 es declarado el Estado de Alarma por parte
del gobierno español. Esto conllevó una serie de medidas pre-ventivas
que tenían como finalidad el distanciamiento social y la
protección de los pacientes que necesitaran asistencia sanitaria,
así como a los propios sanitarios1.
Estas medidas incluyeron la reducción al mínimo de la asis-tencia
presencial sanitaria no COVID-19 a nivel ambulatorio, la
transformación del 95% de las camas del hospital en camas para
la atención de pacientes afectados por la COVID-19, el aisla-miento
de aquellos pacientes infectados por SARS-CoV-2 o los
sospechosos de tener dicha infección, y la restricción de las visi-tas
por parte de los familiares de los pacientes ingresados. Todo
ello no solo supuso una transformación física del hospital y de
sus procedimientos operativos; el personal sanitario experimen-tó
un aumento súbito de la carga asistencial y debió enfrentarse
al brote epidémico reciclando súbitamente sus conocimientos
básicos, presentando por todo ello una mayor probabilidad de
padecer estrés y ansiedad2,3.
Basándose en estas necesidades asistenciales y en diversos
protocolos de actuación ante crisis sanitarias4-6, desde el Depar-tamento
de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital Central de
la Defensa «Gómez Ulla» se gestionaron cambios en el mode-lo
asistencial para poder cubrir las necesidades derivadas de la
pandemia7,8. Se realizaron importantes cambios en las distintas
secciones del departamento que se detallan a continuación.
RECURSOS HUMANOS
El staff del servicio cambió su funcionalidad. Cuatro psi-quiatras
se integraron en el equipo médico de atención directa
a pacientes con COVID-19. Los Residentes de psiquiatría igual-mente
implementaron su actividad con guardias de puerta no
especializada y atención en primera línea en plantas COVID-19.
El resto de personal mantuvo la continuidad asistencial del pa-ciente
psiquiátrico, asumiendo las nuevas demandas asistencia-les.
Se aumentó el staff con dos comisionados. El 13 % del staff
se infectó, cifras parecidas a las de otros centros9.
ATENCIÓN A LOS PACIENTES HOSPITALIZADOS
1. Unidad de Hospitalización Breve de Psiquiatría
La Unidad de Hospitalización del Servicio de Psiquiatría del
Hospital Central de la Defensa «Gómez Ulla» consta de 31 ca-mas,
todas ellas en habitaciones individuales. Desde un punto
de vista funcional, está dividida en dos secciones: una Unidad
de Vigilancia Intensiva Psiquiátrica (UVIP) con 11 camas y otra
Unidad de Hospitalización Breve (UHB) con 20 camas.
Desde los primeros momentos de la pandemia, la Unidad de
Hospitalización de Psiquiatría permaneció operativa en su to-talidad
y prestó apoyó a otros hospitales de la Comunidad de
92 Sanid. mil. 2020; 76 (2)
Madrid cuyas camas psiquiátricas estaban total o parcialmente
cerradas como consecuencia del brote epidémico.
Los ingresos psiquiátricos que procedían de otros hospitales
fueron coordinados por la Jefatura de Servicio y la Coordinado-ra
de Salud Mental de la Comunidad de Madrid.
A todo paciente psiquiátrico y con objeto de identificar por-tadores
de coronavirus, en el momento de su ingreso se les hacía
un screening (analítica general, RX de tórax, y PCR). El resul-tado
de la PCR estaba disponible en las primeras 24 horas de
ingreso.
Se designó la UVIP con sus 11 camas como lugar de hospi-talización
de aquellos pacientes que precisasen una hospitaliza-ción
psiquiátrica y presentasen una infección por SARS-CoV-2.
De la UHB se destinaron 4 habitaciones de transición para
aquellos pacientes psiquiátricos que ingresaban sin clínica com-patible
con COVID-19 pendientes de resultados de las pruebas
de screening.
Para el tratamiento de los diversos cuadros psiquiátricos en
pacientes infectados por SARS-CoV-2, se siguieron las recomen-daciones
aportadas por las principales guías clínicas publicadas
hasta el momento10,11.
Durante el periodo de tiempo transcurrido desde el día 14 de
marzo del 2020 hasta el 30 de mayo de 2020, se han realizado un
total de 62 ingresos en el Servicio de Psiquiatría y Salud Men-tal.
De ellos, 20 (32%) fueron procedentes de otros hospitales de
Madrid. Del total de ingresos, el 19% (12 pacientes) presentaron
SARS-CoV-2 positivos.
Los 12 pacientes se recuperaron satisfactoriamente de la in-fección
por SARS-CoV-2, negativizando las PCR y cesando los
síntomas por completo, no falleciendo ninguno de ellos.
2. Unidad de Interconsulta de Psiquiatría
La sección de Psiquiatría de Enlace tuvo 132 interconsultas
entre el 14 de marzo y el 31 de mayo . El 74% (n=97) fueron
sobre pacientes ingresados por COVID-19 que presentaron ma-yoritariamente
cuadros confusionales de diversa intensidad o
psicosis secundarias al uso de fármacos en el tratamiento activo
del COVID-19. El 26% restante de las interconsultas correspon-dieron
a pacientes no covid-19 que estaban ingresados por otras
patologías. Los cuadros más frecuentes fueron reacciones adap-tativas
o descompensaciones de psicopatología previa.
ATENCIÓN A FAMILIARES
1. Atención telefónica a familiares de pacientes ingresados
El equipo de Salud Mental, en coordinación con las dife-rentes
unidades médicas hospitalarias, ha procedido a informar
telefónicamente a los familiares de todos los pacientes ingresa-dos
por COVID19. Dicha asistencia se realizaba diariamente,
de lunes a domingo, una vez recibido el parte médico de la evo-lución
de cada paciente. La intervención estaba protocolizada,
pudiendo hacerse en un momento dado contención y apoyo
psicoterapéutico. Se realizaron 4185 llamadas, una media de
110 por día.