Sistema contracarro «Spike»
13
Primero, la consolidación de la estructura
conjunta. Desde la elaboración
de la Revisión Estratégica de la
Defensa en 2003 se habían producido
grandes avances: refuerzo de
la figura del JEMAD, articulación de
las Fuerzas Armadas en una estructura
orgánica para preparar la fuerza
y una estructura operativa para
emplearla en operaciones, creación
de un Estado Mayor con todos los
elementos necesarios para planear
y conducir operaciones conjuntas,
publicación de la primera doctrina
conjunta y organización de una
Fuerza de reacción rápida. Los últimos
hitos fueron la creación de
los mandos de operaciones especiales
y de ciberdefensa en 2013, y
la integración de la estructura militar
en una Fuerza Conjunta un año
después. Planteada en el Real Decreto
872/2014, de 10 de octubre,
por el que se establece la organización
básica de las Fuerzas Armadas,
esta Fuerza, compuesta por
120 000 efectivos (67 000 desplegables
o en misiones permanentes
y 53 000 en labores de apoyo), sirve
para guiar el planeamiento de defensa,
identificar las capacidades
prioritarias, fijar las competencias
de personal y orientar la adaptación
militar16.
Segundo, la constitución del CCDC.
Creado por la Orden de Defensa
166/2015, de 21 de enero, por la
que se desarrolla la organización básica
de las Fuerzas Armadas, este
centro, actualmente integrado en la
División de Desarrollo de la Fuerza
(DIVDEF) del EMACON, reemplazó
a la Unidad de Transformación de las
FAS (UTRAFAS) constituida en 2005
para guiar el proceso. Dividido en
tres áreas (análisis y prospectiva para
identificar problemas operativos, desarrollo
y experimentación de conceptos
para explorar soluciones que
puedan traducirse en capacidades
militares y doctrina conjunto-combinada
para guiar el empleo de la Fuerza),
este centro juega un importante
papel para orientar la transformación
futura junto con la DIVDEF para desarrollar
la Fuerza y la División de Planes
para orientar la transformación.
Desde su constitución, este centro
que participa (tal y como hizo su antecesora
entre 2005 y 2015) en las
iniciativas transformadoras aliadas,
europeas y multinacionales, no solo
ha coordinado la generación de doctrina
conjunta y desarrollado conceptos
(ciberdefensa, contrasistemas no
tripulados, antiacceso y denegación
de área (A2/AD), operaciones multidominio
o ámbito cognitivo), sino que
también coordinó la elaboración del
OE2035 para orientar la adaptación
de las Fuerzas Armadas al mundo del
mañana.
Tercero, la reforma del planeamiento
de defensa. Codificado en la Orden
Ministerial 60/2015, de 3 de diciembre,
por la que se regula el proceso
de Planeamiento de la Defensa (OM
60/2015), este reemplazó al primer
modelo de planeamiento por capacidades
desarrollado en 2005 para apoyar
la transformación. Durante su vigencia
había contribuido a consolidar
la concepción conjunta de las Fuerzas
Armadas y concebir el armamento
como uno de los componentes de
la capacidad militar, mejorar la gestión
de los recursos o armonizar el planeamiento
nacional con el aliado. Sin embargo,
la experiencia acumulada de
los ciclos 2005-08, 2009-12 y 2013-
16, junto con los efectos de la crisis