APOYO POBLACIIÓN CIIVIIL
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logísticas desde las zonas ya limpiadas por la
UME, hasta cada uno de los centros hospitalarios.
Además, se realizó el traslado de controladores
aéreos desde Madrid al Centro de Control de
Tráfico Aéreo próximo a la Base de Aérea de
Torrejón, y la limpieza y restablecimiento de la
plena operatividad de la estación de Chamartín.
A las pocas horas del inicio de la operación,
el GT «Tierra» recibió la orden de aumentar su
entidad agregando más secciones de maniobra
y otro S/GT del Mando de Ingenieros (S/
GTMING 2). Concretamente, el S/GT BRIPAC
se reforzó con una sección del BZPAC, una
sección de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército
de Tierra (FAMET) y una sección del Mando de
Artillería Antiaérea (MAAA). Por otro lado, el
S/GT BRIAC se vio reforzado con una sección
de la BRIAC XII y una sección del Mando de
Transmisiones (MATRANS). Esta integración
haría que, al mando de la BPAC II, se aunaran
los esfuerzos de diversas unidades de Madrid,
Burgos y Zaragoza. Dicha sinergia, se produjo sin
ningún problema ni fricción, quedando patente
la rápida disponibilidad, interoperabilidad y
eficiencia de las unidades paracaidistas a la hora
de generar encuadramientos operativos y de
cumplir misiones de cualquier índole.
Una vez que se alcanzaron los objetivos
de Madrid capital y demostrada la capacidad
de asumir los cometidos asignados, el GT
«Tierra» desplegó por el resto la Comunidad de
Madrid con el propósito de limpiar y unir zonas
industriales con localidades y de despejar vías
de comunicación en zonas urbanas. Asimismo,
secciones de refresco de la BPAC I y del
GACAPAC relevaron a las secciones del S/GT
BRIPAC y secciones de la BRIAC XII hicieron
lo propio con el S/GT BRIAC.
El GT «Tierra» en general y los paracaidistas
en particular, se han manejado con rigor y
profesionalidad ante la situación cambiante,
teniendo que hacer frente a múltiples factores,
como pueden ser el terreno la meteorología o la
situación COVID-19 tan presente en la actualidad.
Todos los obstáculos encontrados fueron
superados con soltura, gracias a la flexibilidad y
adaptación que caracterizan a los paracaidistas.
La meteorología, que durante toda la operación
ha sido muy adversa con temperaturas gélidas
jamás registradas hasta la fecha, ha sido un
estimulante para el personal encargado de picar
los duros centímetros de hielo o de retirar, pala en
mano, grandes cantidades de nieve de las calzadas.
A pesar de todo ello, como siempre ha sido y
será, por encima de todo estuvo la misión. En esta
ocasión, intervino un agente externo, atípico en
las misiones que se desempeñan en el día a día,
la población civil. Numerosos ciudadanos, de
manera desinteresada, agradecieron la labor que
fue realizada y ofrecieron al personal todo tipo de
apoyos amenizando las duras jornadas de trabajo.
Tras el comienzo de la operación el sábado
9 de enero, la movilidad en la Comunidad de
Madrid mejoró sustancialmente, dando inicio
a un proceso de rotación entre las unidades
que participaron en la Operación «Tormentas
Invernales Madrid 2021», con lo cual, el lunes
18 de enero, el mando y esfuerzo principal del
GT «Tierra» fue asumido por el BZPAC.